El Caso de los «horrolores»: «Me echan de mi propia casa»
Como venimos contando, en la ciudad de Toledo existe un edificio, el María Cristina, en el que están un Burger King, un conocido hotel y viviendas.
En sus bajos una fosa séptica, de la que emanan olores y gases fétidos e insalubres, hace la vida muy difícil a una treintena de familias.
Lo contamos bajo los títulos de El edificio de los «horrolores» de Toledo que «mata» a los vecinos con sus olores fétidos y Vivir con emanaciones de olores y gases tóxicos debajo de tu casa.
Es un caso de contaminación ambiental que llevamos en el y en breve emprenderemos nuevas acciones legales. Una de las afectadas, Margarita Girona (en las fotos), nos actualiza:
Hace unos días, Miguel, te interesabas por nosotros y querías saber cómo seguía la situación que tenemos en nuestras viviendas, si había cambios y si algo había mejorado, preguntabas cuál era nuestra realidad tras el paso del tiempo.
Hoy te respondo con sensación de derrota, de hundimiento, de gran abatimiento y profundo dolor ante la pérdida aparente de esta batalla por nuestra salud, bienestar y calidad de vida. De momento los que me provocan tanto sufrimiento, tanto malestar, van ganando porque a pesar de tanta lucha, han conseguido echarme de mi propia casa.
No me queda otro remedio que emular a varios inquilinos que vivían en régimen de alquiler en viviendas de este edificio que se han ido marchando porque les era insoportable vivir en estas circunstancias.
En mi caso, no solo es que sea insoportable respirar este ambiente contaminado un día tras otro.
Es que esa persistente contaminación está provocando que mi salud esté cada vez más deteriorada.
Padezco graves complicaciones que me obligan a tener que dejar este nocivo y tóxico ambiente que penetra en mi casa.
(En la foto Margarita Girona antes de que comenzara su calvario).
Para quien no conozca el caso voy a intentar resumir al máximo lo que ocurre en este edificio de los “horrolores” y porqué.
En la década de 1980 del siglo pasado un constructor hace un edificio de forma rectangular con un gran patio central. Ese edificio alberga en la actualidad locales como un hotel, una cafetería, Burger King, otras oficinas, y viviendas como la mía.
La empresa constructora, aunque haya cambiado su denominación a lo largo de estos años, es a su vez propietaria del hotel. El edificio, por construcción, tiene una serie de elementos comunes como cimientos, suelos, vuelos, foso, muros, cubierta, canalizaciones, etc.
De esos elementos comunes, el Hotel asume como propia una instalación que es común, cual es el foso para recogida de aguas freáticas del edificio y lo destina a fosa séptica, a pozo negro que a su vez lo arrienda desde hace años a Burger King para su utilización donde verter los residuos fecales de los aseos públicos y del personal del negocio, así como los residuos de las cocinas del establecimiento.
Los vecinos no sabemos si hay otras instalaciones conectadas a la fosa séptica puesto que se han solicitado a la empresa constructora y propietaria del hotel los planos de evacuación sanitaria del edificio, así como los de esa instalación apropiada y su ruta o rutas de evacuación, pero no los ha facilitado.
También se ha solicitado a Burger King información de los productos usados en el mantenimiento del pozo negro, información que tampoco ha sido facilitada.
Esa instalación vierte su contenido a la red de saneamiento municipal y cuando esto ocurre, muchas veces, más de una vez al día, los vertidos provocan una inmisión de terribles hedores fecales acompañados de gases y productos químicos, que contaminan e intoxican el aire interior de nuestras viviendas haciéndolo irrespirable.
Además, hay que tener en cuenta que ya podemos hablar de gases de manera clara y específica: Los vecinos, por medio del asesoramiento y dirección de un experto en Riesgos Laborales y Calidad de Aire Interior, hemos podido captar -en varias viviendas donde se efectuaron pruebas- la inmisión de gases.
Y ha resultado que son muy, muy tóxicos y nocivos para la salud como son, entre otros, amoníaco y ácido sulfídrico o sulfuro de hidrógeno, conocido por los expertos como “gas alcantarilla”, altamente nocivo y peligroso.
Me preguntas por qué mi situación es diferente a la del resto de vecinos, por qué ellos no se marchan de sus viviendas y siguen aguantando.
Lo que es completamente evidente es que estar respirando esta contaminación sostenida daña a todo el mundo, pero en mi caso particular, en 2016 se me diagnostican dos enfermedades, Encefalomielitis Miálgica y Sensibilidad Química Múltiple (SQM).
Tener SQM, una «enfermedad ambienta», es un gran fastidio no solo por los males que provoca en la salud de tu cuerpo sino por los cambios y cuidados que has de acometer en tu vida para intentar evitar la afectación de los productos químicos, ¡cuando estamos rodeados de ellos!
En lo referente al control ambiental prescrito por los especialistas para el lugar donde yo resido, mi casa, hay que entender que mi hogar es mi refugio, donde en teoría me aíslo, me protejo, donde pretendo sentirme segura de poder escapar de los químicos tóxicos que hay en el exterior.
Purifico el aire que viene del exterior y el agua que entra dentro de mi casa. Los productos de alimentación, limpieza, higiene personal, cosmética y etc, son ecológicos y todo, absolutamente todo es por prescripción médica para cuidar el deterioro de la salud y que la enfermedad no avance.
Pero no hay manera, son gases y se filtran por todas partes, no hay quien los detenga una vez que lanzan el contenido de esa fosa al exterior.
A PESAR DE MIS CUIDADOS, SIGO EMPEORANDO
Al igual que he tomado grandes medidas para que mi casa sea mi refugio, también me toca cuidar de mi salud. Desde hace años he acometido diferentes y costosas pruebas y tratamientos, abordando diferentes enfoques y maneras de bajar la carga tóxica de todo mi organismo.
Soy una enferma crónica y mis cuidados y tratamientos son también crónicos y periódicos, y todo únicamente sufragado por mí. He invertido mucho tiempo, energía y muchísimo dinero, provocando un tremendo empobrecimiento para mí y mi familia por cuidar de mi salud…
…Para seguir empeorando por culpa de esa contaminación ambiental, de ese monstruo que se cuela en nuestros hogares, porque tras varias crisis de empeoramiento por respirar este ambiente tan nocivo, en una obligada revisión clínica se me ha valorado de nuevo confirmando el avance de la enfermedad hasta el grado grave.
Me han condenado a llevar mascarilla de especial protección hasta en exteriores. A tener que aislarme de una forma brutal, sin tener apenas vida social. Me han condenado a soportar un gran sufrimiento emocional.
Han provocado que mi mundo y el de mi familia se tambalee ante el tsunami que ocasiona pensar las complicadas circunstancias que hemos de afrontar al romperse nuestra vida, nuestros proyectos y costumbres de esta manera.
¿POR QUÉ PONGO UNA DENUNCIA POR LA VÍA PENAL?
Porque sé discernir entre lo que significa la «aceptación» ante circunstancias sobrevenidas en la lotería de la vida, como es tener que sufrir una enfermedad crónica con tan tremendo impacto, y una problemática perfectamente evitable como la que nos afecta y nos daña desde hace tantos años.
El derecho de estas empresas a llevar a cabo una actividad económica no debe colisionar con el derecho fundamental a mi salud ni con la privacidad ni inviolabilidad de mi domicilio.
Es una pena que al día de hoy haya personas que aún tengan que abandonar su hogar debido a que el edificio está enfermándolos.
Ya es complicado tener que renunciar a llevar una vida normal, pues es complicado concienciar a la sociedad de que tu salud y bienestar depende de su colaboración, más aún a los políticos de que fomenten medidas en las que se valore a quien cuide del medio ambiente y la salud y castigue a quienes utilicen elementos tóxicos y nocivos. Pero más duro es no encontrar bienestar ni en tu propio hogar.
Mi apoyo a Margarita y a todas las personas que como ella están sufriendo una situacion.
Solicito se ponga solución en breve por el bien de todas las personas que allí habitan.
La justicia demasiadas veces anda sorda y ciega y no defiende a personas como tú. Reconozco que tu lucha es titanica pero tú muy valiente y fuerte. Espero q algún día puedas no tener que seguir siéndolo y vivir tranquila cuidándote y batallar con tus enfermedades que ya sólo con ello es muy difícil vivir.
Te mando un abrazo y beso enormes.
Gracias por tu lucha
La situación que vivimos como vecinos es desesperante e injusta. Según escribo estas palabras está entrando en mi vivienda una de las emanaciones pestilentes. Náuseas, dolor de cabeza, indignación, frío (porque tengo que abrir las ventanas aunque haya 8°en la calle), miedo a que llegue una visita antes de que se pase el olor y tengamos que comer en el salón con esta peste putrefacta… Llevamos años viviendo un calvario que ha empeorado intensamente desde la apertura del Burguer King y el uso sistemático de la fosa séptica para sus vertidos fecales. En este edificio viven personas mayores y otras con problemas graves de salud que pasan la mayor parte del tiempo en su domicilio. La invasión de gases empeora la calidad de vida, nuestra salud física y mental; no sólo porque no descansamos por las noches, sino porque vemos vulnerado nuestro bienestar y seguridad en nuestras propias casas. Todo mi apoyo en los procesos judiciales y de denuncia pública que se están llevando a cabo para solucionar está lacra.
Como asociación brindamos todo nuestro apoyo a Marga y a toda su familia. Nos parece increible además que las autoridades sanitarias no tomen cartas en el asunto pues los vapores emanados son altamente tóxicos como cualquier experto puede confirmar. Nuestras casas deben ser seguras y las autoridades deben exigir que los establecimientos cumplan las normativas a la mayor brevedad. La salud debe de ser lo primero.
Inadmisible la situación de estos vecinos y en especial la de Margarita. Mi solidaridad.Las acciones legales, que parece están en marcha, espero que prosperen y les metan un buen puro y les obligen a solucionarlo.
Es una pena la discriminación que sufren los enfermos que padecen este tipo de enfermedades ambientales, cómo son ignorados y menospreciados por las instituciones públicas. Espero que el ayuntamiento lleve a cabo las medidas necesarias para terminar definitivamente con esta situación, y no permita que se sigan vulnerando los derechos fundamentales de personas discapacitadas, protegiendo así la salud de esta ciudadana y la del resto de vecinos que ven aumentar muy significativamente los riesgos de enfermar también debido a la exposición continuada a tóxicos muy peligrosos para la salud, especialmente de personas más vulnerables como ancianos, niños, embarazadas y otras personas enfermas.
SFC-SQM Madrid, como asociación de pacientes con Sensibilidad Química Múltiple apoya al 100% a Margarita y su familia. No hay derecho a que tengan que abandonar su casa por una mala gestión de los residuos, no hay derecho a una afectación de salud tan brutal como la que hemos observado en nuestra compañera, y está refrendada médicamente. Este año Sanidad de Castilla La Mancha ha presentado un protocolo de atención a los pacientes con SQM, un gran paso que se ve ensombrecido si no se ponen los medios para prevenir la perdida de salud.
La Salud debería ser lo primero y la falta de control de vertidos tiene una afectación de gran impacto para tod@s, trae ratas, insectos, etc.
Pero además de la contaminación ambiental se produce una contaminación del suelo que incluso podría afectar al agua que consumimos.
Es un problema muy grave que necesita una solución inmediata.
Qué injusticia sufren los habitantes del edificio. Menudo silencio guardan las partes implicadas.
Sólo espero que pronto llegue alguna noticia favorable.
Que por favor, cierren la cosa ya
No se puede vivir en esas condiciones, solución ya y depuración de responsabilidades. Es intolerable que exista una fosa séptica en casco urbano, y peor aun que produzca gases tóxicos que te enfermen de por vida.
También está lo del Ayuntamiento, contra el que también hemos emprendido acciones judiciales, que van muy lentas, por cierto. Lo suyo es, como decía mi padre «pa mear y no echar gota»; en este caso pa cagar, nunca mejor escrito. La cagada de un Ayuntamiento que presume el de ser de una Ciudad Patrimonio de la Humanidad, y que va camino de convertirle en Ciudad Patrimonio de la Cagada Humana.
Es indignante que por unas instalaciones mal hechas, estén enfermando a una persona, y no se haga nada!!!
Que cierren el hotel y hagan las reformas pertinentes, ¡YA!
Conozco a Margarita desde hace años, es indignante consentir que esto esté sucediendo.
Exijo que el ayuntamiento de Toledo clausure la fosa séptica y exija a los propietarios del edificio la instalación de alcantarillado acorde a la normativa de vertido de efluentes, con la instalación de un sistema de depuración si fuera necesario. Igualmente, la clausura inmediata de los negocios que incumplan las normas sanitarias y de vertidos en vigor.
Me parece totalmente increíble que estando en 2023 ( no en 1923 ) todavía ocurran situaciones como esta. Yo soy propietario de un negocio y en las visitas de sanidad te avisan de todo lo que hay que hacer para cumplir con la ley pues de lo contrario te dicen que te pueden cerrar el negocio inmediatamente. Siendo este caso un caso extremo y con impacto seguro para la salud de las personas no se porque no se cierran momentáneamente los negocios causantes del daño hasta que se subsane lo que está mal. Como casi siempre, hasta que no ocurra una desgracia todavía más grande que salga en los telediarios, no se hará nada. Después nos preguntaremos cómo pudo suceder. La respuesta es simple, porque las personas responsables de salvaguardar nuestra salud y nuestra integridad hicieron la vista gorda. Patético.
No alcanzo a comprender cómo unas instalaciones hoteleras y de hostelería, ambas situadas fuera del casco antiguo de Toledo mantienen una fosa séptica en actividad pudiendo conectar sus residuos a la red de alcantarillado general, siendo colindantes con una comunidad de vecinos que sufren desde hace años malos olores periódicamente, siendo los mismos evitables. Bien entrado el siglo XXI y en una ciudad que se supone equiparada en cuestiones medioambientales a sus homólogas, es inasumible que se mantenga una situación como esta que vulnera los derechos de unos vecinos que sufren una contaminación de esta índole. La falta de cooperación tanto del Hotel María Cristina como del Burger King, debe obligar al Ayuntamiento a posicionarse en defensa de sus vecinos.
Conozco desde hace años el caso por Marga y su familia. Es indignante e injusto que un ayuntamiento (que se autoproclama justo, equitativo y que vela por el bienestar de sus ciudadanos a la par que cuida de su patrimonio) anteponga los intereses de un franquiciado que incumple las más mínimas reglas de sanidad y seguridad alimentaria a sus propios vecinos.
Ahora ha tenido que EMIGRAR de su casa, sí como antaño, cuando la mierda que nos rodeaba era otra en nuestro entorno y en nuestros ayuntamientos. Emigrar para no fenecer en el esfuerzo desesperante de permanecer en SU CASA.
Entre las lucecitas y las músicas estridentes navideñas que tanto molestan a los vecinos de Toledo, hemos tenido que oir ahora el portazo de Marga para pasar la Navidad fuera de su hogar. Mientras tanto, el franquiciado sigue vendiendo y generando mierda sin control, lucrándose él y el ayuntamiento (sí, otra vez en minúsculas). Cabreante.
Exigimos que el ayuntamiento de Toledo clausure la fosa séptica y exija al/los propietario/s del edificio la instalación de alcantarillado acorde a la normativa de vertido de efluentes, con la instalación de un sistema de depuración si fuera necesario. Igualmente, la clausura inmediata de los negocios que incumplan las normas sanitarias y de vertidos en vigor.
Un fuerte abrazo y mucha fuerza, amiga.
Apoyo total a Margarita, es cuestión de salud, un derecho fundamental.
Exigimos que el ayuntamiento de Toledo clausure la fosa séptica y exija al/los propietario/s del edificio la instalación de alcantarillado acorde a la normativa de vertido de efluentes, con la instalación de un sistema de depuración si fuera necesario. Igualmente, la clausura inmediata de los negocios que incumplan las normas sanitarias y de vertidos en vigor.
Situación intolerable.
Que se clausure la fosa séptica ya.
Apoyo total a Margarita.
Un abrazo.
¿Se pagan tantos impuestos para que el Ayunatmiento no haga nada? Espero que a los que han recibido tantas denuncias y no han hecho nada al respecto, les caiga todo el peso de la ley y se les exijan responsabilidades sean funcionarios o no.
Es una vergüenza que por puro interés económico se prime las condiciones insalubres de un negocio y que están pagando los vecinos.
Espero que con esta denuncia se consiga revertir la situación y que Marga recupere su vida.
En una situación de salud adecuada estar respirando una fosa séptica sería horrible. Pero para una persona con SQM lo horrible se convierte en peligro de muerte a cada instante. Y además dentro de tu propia casa… pero ¿dónde están los derechos y los límites? Clausuren esa fosa ya, por favor. No hay mucho tiempo que perder ni mas vueltas que darle.
Me parece espantoso lo que relata Margarita , es horrible que está mujer este siendo sometida a este martirio…Ruego encarecidamente que se solucionen los problemas con las aguas fecales!!!
Desde SFC SQM Castilla-La Mancha todo nuestro apoyo a Margarita Girona.
Mi solidaridad con los afectados. Espero q ganéis esta batalla. Parece increíble q ahora, q tanto promocionamos el medio ambiente, estéis padeciendo esto. Ánimo
Ante la ausencia de responsabilidad empresarial, la justicia tendría que tomar medidas. No se puede jugar con la salud de las personas. Mi apoyo a Marga y su familia.