*English version Después pasar unos días por tierras barcelonesas dando a conocer los libros (Traficantes de salud y Conspiraciones tóxicas) paso a ofreceros algunos matices sobre la presentación en Madrid, el pasado miércoles 26 de marzo, de la
Plataforma No Gracias, a la que asistí.
En primer lugar destacar la enorme cantidad de firmas de profesionales sanitarios que está recogiendo No Gracias (
para ver y/o firmar el manifiesto). Está claro que hay ganas de cambios importantes en el sistema sanitario en busca de la ética, en gran parte perdida en beneficio de los intereses privados minoritarios.
Durante la presentación de No Gracias, Joan-Ramón Laporte, Catedrático de Farmacología, explicó que hoy existen intereses divergentes entre los pacientes y la industria farmacéutica. Uno de los caballos de batalla de esta Plataforma es acabar con el soborno o cohecho sobre médicos y personal sanitario por parte de muchos laboratorios y empresas del sector.
También con la financiación privada de la formación de los galenos, esta debería de ser pública, dependiente de la Administración, piden desde No Gracias. No será fácil, pues como se comentó en la conferencia, en la última reforma de la Ley del Medicamento, realizada hace casi dos años, se intentó que incluyera la regulación de la visita médica pero casi todos los grupos políticos rechazaron la medida.
Esto plantea de nuevo la siguiente cuestión: ¿quién financia las campañas de esos partidos políticos? No lo sabremos, al menos hasta que tengamos una ley similar a la de Libertad de Información que poseen en Estados Unidos, que obliga a los partidos a declarar de qué empresas proviene la financiación de sus campañas y cuánto dinero reciben (lo cierto es que de nada sirve pues como demuestro en Traficantes de salud el lobby farmacéutico controla el Gobierno USA mediante la financiación de campañas electorales).
España, según los presentes en la cita de No Gracias, es el país que posee más medicamentos con menos de cinco años de comercialización. Esto genera un aumento del gasto público en fármacos, al ser estos de marca, y un crecimiento de los daños y muertes por efectos adversos provocados por los preparados, al estar menos comprobados sus posibles daños.
Juan Gervás, un médico de la Sierra madrileña, hizo un ejercicio público de reconocimiento de sus conflictos de interés con la industria al mostrar varios eventos que en parte le financian ciertos laboratorios. Puso esto como ejemplo de que es tarea casi imposible ser hoy al 100% médico e independiente de los laboratorios.
Revelar voluntariamente los conflictos de interés es uno de los pasos a dar en busca de la ética perdida. Muy bien acogida es la idea que tienen estos profesionales de colocar en las puertas de sus consultas pegatinas que adviertan de que ellos no reciben visitadores médicos.
Gervás denunció también el enorme tráfico de influencias que existe en el sistema sanitario, en el que con frecuencia altos administrativos pasan a las filas de las empresas privadas. Gervás es una rara avis en el panorama sanitario: no recibe visitadores médicos. La mayor parte de los profesionales sanitarios a los que acuden estos vendedores de los laboratorios sí lo hacen, y lo ven como algo natural. Desde No Gracias abogan por eliminar la visita para evitar el tarugueo o compra de voluntades con regalos, atenciones o dinero (Ver los videos de Informativos Tele5).
Carmen Ortiz, presidenta de la Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública, promotora de No Gracias, explicó que no existe ánimo de confrontación con otros profesionales sanitarios sino que intentan animarlos a reconducirse hacia las buenas prácticas.Estas y otras muchas cuestiones se debatieron en la presentación de No Gracias. Seguiremos informando. De momento, la organización no para de recibir adhesiones, la penúltima de la Asociación de Médicos Progresista de la Comunitat Valenciana.
El soborno,la corrupción, el cohecho,el trato de favor,el amiguismo, el tráfico de influencias, la malversación de caudales públicos y un largo etc. están a la orden del día.
El médico se deja sobornar fácilmente. Esta enfermedad es hereditaria y difícil de erradicar. Existen muchas leyes que hacen referencia a los sobornos. ¿Porqué no se aplican?.
Excelente tu exposición. Es para leerla varias veces y reflexionar sobre los pensamientos que nos permites compartir contigo.
¡Cuántos valores negativos arrastamos en esta sociedad! Indiferencia, irresponsabilidad, egoísmo, pasividad, miedo…
Sí, es como si no quisiéramos ser protagonistas de nuestra propia película ni dueños de nuestra propia vida, como si nos interesara ser sólo meros espectadores a la espera, como en la ficción, de un final feliz.
Gracias por tus deseos y por tu motivación.
El día que todos -todos, no unos cuantos «maniáticos» obsesionados por la teoría de la corrupción, me parece que ya nos entendemos…- comprendamos por fin que vamos todos en el mismo barco y que todo lo que cada uno de nosotros hace y todo lo que no hace influye en la calidad de vida de todos los demás, además de en la nuestra propia, se dará el primer paso hacia ese hipotético y utópico mundo justo que al parecer todos deseamos y necesitamos.
Porque sólo hay un barco. Con distintas categorías de camarotes, eso sí, y me parece que no hace falta recordarle a nadie lo que le pasó al Titanic, a qué clase pertenecían mayoritariamente los pasajeros que subieron a los insuficientes botes de salvamento y cuántos de esos botes se alejaron medio vacíos de la catástrofe inminente. Sólo tenemos un barco, y si se hunde, no hay a dónde ir.
Mientras una mayoría continúe mirando hacia otro lado como si la cosa no fuera con ellos, los «raros» seguiremos siendo unos alarmistas catastrofistas anticonspiracionistas y todo eso. Seguiremos siendo mensajeros indeseables.
Se están fundiendo los polos, y se nos dice que el mundo ya pasó por esto, y que las emisiones contaminantes de millones de fábricas y de coches no tienen nada que ver, y pasan por alto el nimio detalle de que entonces no había humanidad que se pusiera en peligro ni que se quejara, claro. Y los raros somos nosotros. Nos alimentamos de carnaza, dicen. Vaya por Dios.
Y como eso, tantas cosas, como todos sabemos, que darían para llenar varias enciclopedias…
La contaminación, a todos los niveles, está a la orden del día. La información que nos llega también está contaminada, y mucho. Y una mayoría de personas, por miedo, por desinterés, por indiferencia o por simple irresponsabilidad (la culpa es siempre de los otros, la obligación es siempre de los otros; nadie sabe qué, nadie sabe quién, sólo sabe que «yo no he sido» y «a mi que no me miren»), se limita a tragársela sin hacer el menor esfuerzo por matizarla, darle la vuelta ni buscar alternativas.
La mayoría, también, bien porque en la ignorancia se vive mejor y no quieren saber, bien porque quizá intuyen la realidad pero no quieren hacer nada por cambiarla (que lo haga otro, a mi qué me cuentan, yo ya pago mis impuestos…), reaccionan con agresividad ante los intentos de cambiar las cosas por parte de los locos esos de la teoría de la conspiración…
No vamos a cambiar el mundo, ¿lo sabéis, no? Pero no nos vamos a quedar cruzados de brazos mientras nuestro barco (nuestro barco, no suyo y de nadie más) se va derecho a un iceberg, en un mar helado sin ninguna orilla en un ningún sitio a donde dirigirse.
Que tengáis todos un buen día, dentro de lo posible… Y que conservemos todos el buen humor, porque lo vamos a necesitar!!!
«Nikita piensa que mi capacidad para comprender la lectura es nula, asíque puede ser que me haya equivocado cuando se me ha cuestionado…»
No entiendo lo que quieres decir.
Sabemos que todo el mundo no es corrupto, ello no implica que no haya corrupción. Estoy de acuerdo en que la visita médica puede ser un trabajo digno, y no se cuestiona el trabajo bien hecho. Se cuestiona la visita médica basada en tarugueo, sí ésa que para ti no eixiste.
Por curiosidad, ¿Qué se ha sacado de contexto de tus comentarios?
Yo también deseo un mundo justo, hace falta algo más que deseos para que el mundo sea justo.
Hola Ariadna, mi intención nunca fue la de faltar el respeto a nadie.
Nikita piensa que mi capacidad para comprender la lectura es nula, asíque puede ser que me haya equivocado cuando se me ha cuestionado…
Simplemente quería expresar que no todo el mundo es corrupto y la dignidad de mi trabajo, del que me siento muy orgullosa, pero parece que diga lo que diga se saca de contexto y se le saca punta (será debido a la incapacidad de expresarme).
Mi deseo: Un mundo justo.
Nada más.
Un saludo,
Ciertas tus palabras, al menos desde mi parecer. A algunas personas les interesa «matar al mensajero», es su opción para no coger el «toro por los cuernos», o para no tener que enfrentarse a la incoherencia de sus propios argumentos.
Estoy de acuerdo también con que la información sesgada nunca puede llegar a buen puerto, menos intencionadamente. En relación con los visitadores médicos, no se puede intentar convencer a la gente de que somos/son formadores de clínicos cuando la realidad es que somos/son vendedores con los suficientes conocimientos de los productos, como todos los vendedores. Por otro lado, opino que debe haber una relación entre los proveedores y los clientes, entre médicos y laboratorios, porque cierto es que son complementarios, pero debe ser una relación transparente y con un objetivo común único, mejorar/curar las enfermades.
Ser realmente una cosa y aparentar otra es una estrategia a corto plazo, sin futuro alguno. Soy partidaria del largo plazo, por tanto, creo que en los trabajos como en la vida hay que ir con paso firme y seguro. Una regulación de la visita médica o un control de la regulación existente culminaría con miles de visitadores sin trabajo, con las implicaciones sociales que ello acarrearía. Sin embargo, estos protagonistas no quieren ver más allá de su corto plazo, de su manera fácil de conseguir tratamientos, de sus incentivos por conseguir esas recetas no importa cómo. No les interesa reconocer lo que están haciendo mal porque el hoy no les permite ver el mañana y quizá el mañana a este paso y con estas estrategias no exista para la visita médica.
Pero el problema no es sólo de los visitadores, sino de los propios laboratorios y de la Administración. Los servicios de salud de las diferentes comunidades saben que los 3 ò 4 señores/as representantes de laboratorios que oficialmente (en realidad son muchos más…) visitan a los médicos en su lugar de trabajo no son informadores técnicos sanitarios, como especifica el carnet expedido por el Insalud (antiguamente), sino representantes o vendedores. Sin embargo, hacen la vista gorda y enfocan la visita médica desde un la perspectiva informativa, no comercial. Eso también es información sesgada.
Es comprensible que visitadores como Carmen, que sabe perfectamente que su trabajo se evalúa fundamentalmente por las ventas, no por la calidad de su formación o información técnico sanitaria, influenciada posiblemente por su propia empresa o por sus propias conclusiones, prefiera contarnos que los visitadores son/somos los asesores de los médicos en cuanto a farmacología se refiere. Ella prefiere hacernos creer eso, quizá le gustaría que fuera así, pero te aseguro que ella sabe perfectamente, como reconoce en su último mensaje, que es una vendedora ( no porque me guste más a mí, sino porque es así).
Respecto a esos dos minutos a los que se resume la mayoría de las veces la visita médica ¿No sería más correcto que hubiera un tiempo suficiente para esta comunicación entre médicos y los laboratorios farmacéuticos en un lugar adecuado, con los medios adecuados y no con fines exclusivamente comerciales? Cada persona cuando vamos a comprar elegimos, en primer lugar , qué queremos comprar y a qué proveedor queremos comprar. Creo que los médicos deberían elegir a qué laboratorios recibir y solicitar información/formación de lo que realmente necesitaran, no un aluvión de mensajes promocionales a modo «ametralladora». Es cierto que es son libres de recibir a los visitadores, pero al final se convierte más en un compromiso personal que en la satisfacción de una necesidad profesional.
Espero la participación en este blog de visitadores médicos que opinen si es necesario un nuevo y saneado concepto de la visita médica o si por el contrario las cosas deben seguir como están.
Gracias, Nikita. Lo conocía ya, pero está bien dar un repaso de vez en cuando. Del tema de los laboratorios farmacéuticos se habla poco y de manera sesgada e interesada, y los pocos que pretenden hablar claro se encuentran con lo que ya vamos viendo. En fin, es lo de siempre: contentos y engañados, vamos hacia el abismo siguiendo líderes y consignas que la mayoría de las veces, la mayoría de las personas ni siquiera cuestionamos. Y cuando algunos lo hacen, el resto se les echa encima. Falta solidaridad y amplitud de miras, sobra tendencia acomodatícia y falta sentido crítico, y qué decir de la intención de asumir compromisos y responsabilidades!!!! Lejos de mejorar, seguimos, como en la más remota antigüedad, matando al mensajero que no nos trae las noticias que nos gustaría escuchar. Así nos va a todos.
Ariadna, te paso el link del tema sobre los incentivos a la receta de genéricos que publicó Miguel en su antiguo blog en mayo de 2008:
http://amorhumoraccion.blogspot.com/2008/05/incentivos-ilegales-para-recetar.html
Como sabrás, los genéricos son fabricados por laboratorios farmacéuticos «con ánimo de lucro», en algunos casos los mismos laboratorios que fabrican los medicamentos de marca. En ningún caso y bajo ningún concepto, es admisible que se incentive su receta.
Carmen: Siempre intento dialogar, hasta con los más opuestos, mejor dicho sobre todo con los más opuestos, porque con esos precisamente es con quien más falta hace el diálogo…
Creo que las posturas más opuestas pueden sentarse a la misma mesa sin perder ni un gramo de compostura ni de dingidad, si se tiene siempre presente el respeto hacia el que se sienta al lado, unas sillas más allá y, por supuesto, al que se sienta al otro lado de la mesa.
Dicho esto, debo decir que en otro hilo de este bloc se ha perdido ese respeto, cosa que lamento. Francamente, cuando una discusión se personaliza demasiado y se convierte en un terreno estéril que no produce más que malestar, es mejor dejarlo. Cuando las posturas se enrocan y alguien se muestra absolutamente a la defensiva y claramente remiso a dejarse convencer de nada, también.
También debo decir que yo desde luego que no me cuestiono la relación médico-paciente, siempre que el médico sea como debe ser, me atienda debidamente, no se crea un dios y no intente manipularme ni olvide que tengo mi propio criterio, sobre mi salud y sobre todo lo demás.
No está en mi naturaleza generalizar en nada, siempre veo las dos caras de todas las monedas. A veces, hasta les veo más de dos… Me deja preocupada tu frase: «Al médico se le incentiva por prescribir los fármacos más baratos (genéricos) y hay quien lo hace y hay quien no.» Más que nada, por el uso del verbo «incentivar».
Nikita: Me uno a tus buenos deseos.
¿Los médicos recetan lo mejor a sus pacientes por prestigio? ¿Eso es lo que piensas? Eso es lo que has escrito. Personalmente, creo que es una barbaridad y una ofensa al cuerpo médico en general, profesión vocacional y sacrificada donde las haya, repleta de responsabilidades, independientemente de que haya excepciones que no se deban pasar por alto.
Para intentar convencer hay que tener argumentos y que los argumentos sean coherentes. En tu caso, Carmen, y en mi modesta opinión, careces de los dos ingredientes necesarios. Luego, nos quejamos los visitadores médicos de que la opinión pública nos tacha de poco profesionales…
Pido disculpas al resto de lectores del blog de Miguel por tanta intevención en este tema, pero las ambigüedades y la información sesgada me superan.
nykyta2008@gmail.com
El objetivo principal de los visitadores médicos es vender, con confundas a los lectores ¿Ofrecer el fármaco a la persona indicada…? No, ofrecer el fármaco al médico para que lo recete. Y voy a puntualizar más, no por convencer a ti, amiga Carmen, sino para informar al que le interese este tema:
En las primeras visitas de lanzamiento de una nueva molécula algún médico te permite «instruirle» a cerca de interacciones, contraindicaciones, mecanismos de acción, indicaciones… Yo solía organizar una charla con un ponente de prestigio
En el resto y mayoría de las visitas, se les recuerda el nombre comercial, la presentación, se les regala un boli (o similar) y se les pide la receta. Sí, es verdad que con fines comerciales se identifica el tipo de paciente que se puede beneficiar de las características del fármaco, pero con fines comerciales no con fines didácticos… Lo importante para el visitador médico es conseguir tratamientos, aunque una buena estrategia es convencer al médico ayudándoles a identificar en qué tipo de pacientes va a conseguir mejores resultados.
Y sigues haciendo comparaciones de «y tú también» como la comparación con el periodista y la niña del terremoto…
Tan mal está que la Administración incentive a los médicos para que receten genéricos, como que sean las empresas farmacéuticas las que intenten hacerlo (o lo hagan). Hay una sentencia reciente que desaprueba y condena a la Administración por pagar incentivos a los médicos que recetaban genéricos. Creo que está incluso en este blog..
Para finalizar, ¿ No crees que con estos comentarios tan alejados de la realidad, como que el objetivo de un representante médico no es vender, se crea una imagen distorsionada de la visita médica que lo único que genera es desconfianza en la gente?
Me ha gustado tu exposición y tu punto de vista como «usuaria» de la Seguridad Social. Por supuesto, comparto tu criterio de que los corruptos sean 4 ò 4.000 son como una manzana podrida que no pueden más que empeorar a las manzanas de alrededor. Por eso hay que luchar para eliminar estas manzanas podridas.
Yo he luchado largo y tendido porque «esos más de cuatro corruptos organizados» que tenía en mi entorno dejaran de jugar sucio. En mi lucha he tenido que abandonar mi puesto de trabajo porque mi salud es prioritaria y , porque el «acoso laboral» no es plato de buen gusto para nadie… Pero si volviera otra vez al día en que comenzó todo, no cambiaría el final, tampoco habría alternativa.
Y respecto a ti, amiga Carmen, espero que cuando la corrupción llame a tu puerta o pase cerca de ti, no mires a otro lado. Espero que seas sincera con esos recursos que dices tener de justicia, verdad y honestidad, y también te deseo que tu laboratorio no sea ningún nido de sanguijuelas de las que «chupan» la voluntad y la moral de sus empleados.
Hola Ariadna, estoy de acuerdo contigo en que los médicos deben estar informados por revistas y especialistas, artículos, etc… y esa es una parte que realizamos. Los visitadores médicos pueden ser médicos o no, hay de todo como en botica, mucho farmacéutico y mucho químico.
El objetivo del visitador médico no es sobre todo vender, es ofrecer el fármaco a la persona indicada, aquella que lo necesita. Los fármacos están destinados a enfermedades concretas y también tienen interacciones, efectos secundarios… que manifestamos al médico, insisto, recomendamos usarlo en los pacientes adecuados.
Yo soy visitador médico pero también soy usuaria de la seguridad social.
Al médico se le incentiva por prescribir los fármacos más baratos (genéricos) y hay quien lo hace y hay quien no.
El médico, odontólogo o cualquier profesional de la salud que no quiera recibir a un visitador, pues está en su derecho.
Ariadna, no quiero la corrupción en ninguna profesión, pero me sorprendió, cuando entré en este blog por casualidad, cómo había personas que parece que le va la vida en el tema de la industria farmacéutica (que si se inventan enfermedades… que si se sobornan médicos…. que si los intereses creados…) mencionando al visitador médico que no se mueve en altas esferas y es solo un trabajador nada poderoso…
Cuando un fármaco sale al mercado, éste está avalado por estudios científicos, por la FDA, por la EMEA… tienen que aportar que es beneficioso y útil, al no ser, como se pretende hacer aquí, que todo el mundo mundial es corrupto.
Bueno Ariadna, un placer hablar contigo y que no te cuestiones la relación médico-paciente que sin duda el médico (aunque solo sea por prestigio) te dirá lo mejor para tí.
Un saludo,
Mi humilde opinión personal de simple paciente-usuaria (ahora parece que eso es lo que somos; ni siquiera clientes, simplemente usuarios… Como si la seguridad social se mantuviera sola) es que los médicos deben mantenerse al día y estar infromados, sí, pero leyendo libros especializados escritos por especialistas en sus respectivos ámbitos, revistas médicas, etc. ¿Los visitadores médicos son médicos? ¿La obligación de todo comercial representantes de una empresa no es por encima de todo vender ? Pues eso. No se puede ser juez y parte, Carmen. Con todos mis respetos, y porque desde luego no tengo motivo alguno para suponer que tu seas uno de esos visitadores corruptos y nada más lejos de mi intención sugerirlo. Pero de verdad que opino que si estiviera en tu lugar, como profesional honesto, lo que me interesaría por encima de todo sería erradicar la corrupción de mi profesión. Da igual si son 4 o 4.000. Los querría a todos fuera, querría trabajar lejos de toda suspicacia. Es sólo mi opinión, claro. Creo que todos hemos conocido médicos que recetan pocos medicamentos, y sólo cuando hace realmente falta, remedios eficaces de larga experiencia, y a otros que, para lo mismo, recetan a las primera de cambio medicamentos carísimos. La pregunta es porqué. No me digas que no hay corrupción. Sobre todo formando parte de la profesión, no se puede ser tan ingenuo. Tampoco debes sentirte ofendida, creo yo. Nadie está generalizando. Desde el primer momento se ha hecho una clara distinción entre profesionales honestos y los que no lo son, entre médicos que se venden y los que no. Hay movimientos y colectivos de médicos que se están pronunciando abiertamente y decididamente contra determinadas prácticas, y ellos deben saber mejor que nadie porqué lo hacen. Mi dentista se niega a recibir visitadores, y también debe saber porqué. La verdad a veces tiene varias caras, Carmen. No te quedes sólo con una.
Y una puntualización, los gerentes y visitadores implicados en las facturas de cursos de informática inexistentes tapadera de regalos a médicos , siguen en la plantilla del laboratorio, que es una multinacional de las más importantes. Y son bastante más de 4…. ¿Quién tiene la culpa de esta carnaza?
Estimada Carmen:
En primer lugar, me puedes y/o me quieres explicar por qué un informador técnico sanitario tiene que invitar a comer/cenar a unos médicos si no hay una relación comercial. Estarás de acuerdo conmigo que cuando un proveedor invita a comer a un cliente, lo hace por negocio no por generosidad. Aplicado a la visita médica, el objetivo de la comida es conseguir más recetas del fármaco que te da de comer ¿o no es así? Si no es así, díme por qué invitas a comer a los médicos.
Y no creo que ningún médico se venda por un comida o una cena porque están saturados, pero te aseguro que las empresas farmacéuticas cuando pagan comidas, cursos, y/o congresos es porque esperan tratamientos a cambio. Si no cuéntanos qué te pasa si inviertes muchos miles y las ventas van mal….
Y si aplicamos el Código Penal literalmente, podríamos identificar estos actos con el cohecho. Cohecho porque hay una intención de actuar sobre la voluntad de receta de los funcionarios, o sea, la mayoría de los médicos. Y es cohecho independientemente de que los médicos acepten o no el soborno, es cohecho el acto del visitador que ofrece una dádiva para intentar influir en la decisión de un funcionario público. Una dádiva es cualquier cosa, incluído una comida.
Otra contradicción de esta profesión es el mismo trabajo en sí. Según tú, que adoleces de honestidad, dices que los visitadores médicos somos expertos en farmacodinamia y farmacocinética… Pero Erizo, que también es visitador y aparentemente más sincero que tú, reconoce que siempre le han ido bien las ventas. Es decir, que la relación que mantiene con los médicos, sus clientes, es una relación comercial; su trabajo no es dar clases magistrales sobre la farmacodinamia o la farmacocinética sino vender «cajitas».
Bien, esta contradicción en el propio concepto de la profesión es lo que provoca que el público vea esta profesión con recelo y estemos en el punto de mira.
Por tanto, opino que se debería recapacitar por qué la imagen de la industria farmacéutica está tan manchada y especialmente la de los visitadores médicos. Entre otras cosas, no se puede ser vendedores y hacer creer al resto de la humanidad que somos informadores técnicos sanitarios.
Y no te sientas ofendida porque no me crea tu papel de formadora en farmacodinamia y farmacocinética. Lo siento, pero es infumable.
Reconoce que tu trabajo es incrementar las ventas de los productos que estan en tu porfolio con tus habilidades personales y el presupuesto de inversión del departamento de MKT. Entonces creeré en tu honestidad, tu verdad y tu justicia.
El objeto de crítica en este blog es cuanta más carnaza mejor, no se puede hacer una plataforma Soborno a Médicos No Gracias cuando los tarugos son 4, los visitadores y médicos chapados a la antígua usanza que afortunadamente, prácticamente están desaparecidos.
A Erizo, le haces una pregunta: ¿has estado cenando “alguna vez” con médicos y luego habéis ido a tomar una copa aunque sea sin alcohol?.
¿Qué quieres decir!, que porque ha cenado o tomado una copa ya está comprando al médico?
Miguel dice: «médicos corruptos que por recetar en función de las presiones de los laboratorios dan a sus pacientes preparados químicos tóxicos peligrosos para su salud».
Y no tengo que sentirme ofendida?… ni que los médicos fueran tontos y los laboratorios sanguijuelas… ese es la sensación que me da el leeros.
Espero que Miguel acepte tu invitación y conozca en primera persona lo que es la visita médica.
Una pequeña puntualización: el tema al que respondes se llama Soborno a Médicos: No Gracias. ¿No estás de acuerdo? No hace falta que justifiques que cobras por tu trabajo, todo el mundo cobra por su trabajo. Pero, ¿de verdad te extrañas que la gente nos exaltemos con los médicos y los visitadores corruptos? ¿Tenemos que aceptar que existen…? ¿O pretendes convencernos de que no existen? Y te repito lo que te he contestado en otro tema de este blog, el que existan médicos y visitadores corruptos no implica que todo el colectivo sea corrupto, así que no entres al trapo ni te defiendas de un ataque inexistente si tú no sobornas a los médicos para que receten tus fármacos.
Y que la industria farmacéutica sea un negocio a costa de la salud de los ciudadanos es un hecho, pero ello no implica que se salte las leyes a la torera.
Has hablado del Código Etico, y sería magnífico que se respetara, pero no, no todos los laboratorios ni todos los visitadores lo respetan y las consecuencias son para todo el colectivo.
Así que no defiendas la visita médica bien hecha, que no es el objeto de crítica en este blog sino la visita médica que utliza como herramienta de venta el soborno y el cohecho.
Hola Miguel, soy visitadora médica. Yo también defiendo la libertad y la democracia de las personas, no la del dinero. No me gustan las injusticias ni las desigualdades sociales. Soy humana. Siempre intento ser objetiva y te veo un poco «exaltado» a la hora de hablar de la industria farmacéutica y médicos corruptos. Te invito a conocer la otra cara de la moneda y que también hagas un reportaje (no puedo pagarte) pero es por el bien de la humanidad. Me gustaría que conocieras nuestro código ético, nuestras ayudas humanitarias y nuestra labor de dar un soporte científico a los médicos, de hablarles qué tipo de pacientes pueden beneficiarse con nuestros fármacos, a dar una formación continuada. Te invito a una sesión clínica que los médicos demandan y verás que siempre se habla de enfermedad y por supuesto del tratamiento adecuado. Verás que siempre hay varias opciones y JAMAS se menciona la marca del laboratorio que patrocina la sesión clínica. Sin trampa ni cartón, te invito a un día de trabajo conmigo, así sin ensayar. ¿Aceptas?.
También quiero decirte que la Industria Farmacéutica por supuesto que es un negocio como todo en esta vida, pero también se invierte en investigación y desarrollo, y eso ¡también cuesta dinero!, se descubren enfermedades (no se inventan) y se les intenta poner remedio por no hablar de la cantidad de empleo que genera. Es verdad que las farmacéuticas no son una ONG pero bueno tu trabajo de investigación también lo vendes, tus denuncias las cobras y me imagino que no tiene nada que ver para que también puedas hacer «obras de caridad».
También te propongo, que investigues las sustancias de los fármacos genéricos y de dónde salen todas las impurezas que tienen o tal vez no tiene tanto morbo? ¿Cómo es posible que una sustancia como el paracetamol genérico su precio sea menor que lo que cuesta el cartonaje?
Edelmiro, supongo que es a mí a quién te diriges, dudo porque es difícil estar peor informado que tú. No tengo por norma publicar comentarios faltos de respeto y que además vienen sin firmar (nombre y apellidos para que sepamos quién eres). Pese a la cobardía que esto supone, como ves lo publico pues has tenido la virtud de ofrecernos unas notas divertidas.
Para calmar tu curiosidad, aclararte que fui invitado a Venezuela para hablar sobre enfermedades fabricadas por los laboratorios farmacéuticos. Que mis trabajos fuera de Europa no los cobro en dólares sino en euros. Que lógicamente no me avergüenzo de defender la libertad y la democracia de las personas, no la del dinero. Y que por supuesto que si me invitan de nuevo a Venezolana de TV y hay motivo criticaré las políticas sanitarias del Gobierno.
Gracias por tu aporte (pero la próxima vez deberás identificarte correctamente y comportarte como una persona).
Lo que te faltaba es que te conviertas en un bolivariano mas, fuiste a Venezuela a vender la idea, perdón te pagaron muy bien para que fueras a criticar a las multinacionales americanas, y te vas lleno de $ sucios del gobierno de Chavez. Vergüenza te debería de dar, defiende a los que necesitan ser defendidos, Defiende la democracia y la libertad que te permite hacer todo lo que haces en España. Por que no vas de nuevo a Venezolana de TV y criticas las políticas sanitarias del gobierno de Chavez? Claro eres burdamente inteligente.
Magnifica la labor de la plataforma no gracias, aca en venezuela trabajaremos en esta plataforma.
Erizo, sólo te voy a hacer una pregunta ¿has estado cenando «alguna vez» con médicos y luego habéis ido a tomar una copa aunque sea sin alcohol? Si me dices que no, disculpa pero no te creo.
Erizo, honestamente, no creo que haya generalizado ni insultado pues entre otras cosas, esta información está basada en la experiencia de una ex visitadora que, rara avis en su profesión, se ha atrevido a denunciar las prácticas presuntamente corruptas del laboratorio en el que trabajaba.
Por lo que cuentas, aunque sin llegar al límite de Nikita, tú también estás en la misma onda de dignificar un trabajo. Es de agradecer.
Pero creo que ese no es el debate que hay que hacer. El debate debe centrarse en si los medicamentos son un objeto de consumo más en un mercado o son bienes de salud a los que toda persona debe tener acceso si lo desea.
Desde una lógica mercantilista que trata a la persona como un mero consumidor de fármacos hasta tiene sentido que empresas que sólo tengan como objeto ganar dinero compren a los médicos para que receten sus preparados, cuanto más mejor.
Pero como se trata de una cuestión de salud pública, estoy con quienes como la Plataforma No Gracias de profesionales de salud por la ética están contra la existencia de la visita médica, al menos tal y como está planteada hoy: los laboratorios dicen que es una visita «informativa» cuando es obvio que lo que se hace en publicidad y promoción de fármacos.
Hoy hay mecanismos más eficaces, rápidos y sobre todo seguros para los pacientes (la visita médica ha conseguido que estemos sobremedicados en un 50%) para que los médicos estén perfectamente informados sobre las posibilidades terapéuticas. Un médico con la voluntad que tienen muchos de sus compañeros que no reciben representantes de los laboratorios tiene en internet innumerables publicaciones médicas y científicas sobre estos temas, foros de discusión y listas de profesiponales preocupados por estos asuntos, boletines de los colegios médicos y farmacéuticos, etc.
Reconozco que es muy duro después de tanto tiempo dedicado a lo que te has dedicado escuchar opiniones como esta. Te las manifiesto con todo mi respeto pero es lo que creo: la visita médica necesita una regulación radical con vistas a su eliminación por parte de la Administración pública pues está generando enormes gastos sanitarios al conjunto de los ciudadanos e incidiendo en su salud al estar recibiendo medicamentos que no necesita.
Por cierto, sí hay periodistas corruptos, no todos, claro. Y dependiendo de dónde pongamos el listos más de lo que te piensas. Eso sí no hay tantos periodistas corruptos poniendo en peligro la vida de los ciudadanos como médicos corruptos que por recetar en función de las presiones de los laboratorios dan a sus pacientes preparados químicos tóxicos peligrosos para su salud.
Sobre el periodismo hoy: http://www.gentedigital.es/blogs/madridaguimes/14/blog-post/88/mirlos-capirotes-y-periodistas/
La visita médica se puede ejercer con perfecta dignidad y sin tarugueo, como (muchos compañeros y) yo mismo lo he hecho durante 30 años. Es más, he eliminado sistemáticasmente de mi fichero a los médicos tarugos y a los que se me han insinuado, y SIEMPRE me ha ido bien con las ventas hasta mi jubilación.
La visita médica, éticamente considerada, es una profesión noble porque ayuda al profesional que participa en el acto médico, lo que redunda en beneficio del paciente. ¿Porqué considerar que todo visitador es un delincuente y no lo es quien vende tornillos o zapatos?
Bien es cierto que no todos los laboratorios actúan igual y que, en la profesión, como en el periodismo hay gente de toda calaña, pero de ahí a generalizar hay un gran trecho.
Nadie obliga a un médico a recibir y me consta que los hay decentes que, incluso, han echado de la consulta a quienes han intentado taruguearle.
Matícese, pues, y no se insulte a «la profesión». ¿Hay periodistas corruptos? ¿Todos?