Medicina Integrativa como respuesta a las enfermedades crónicas
En las últimas semanas me estoy interesando por la Medicina Integrativa. Hace dos fines de semana acudí como ponente a una jornada de conferencias en Villena (Alicante) sobre nuevas medicinas en las que un médico, Pablo Saz, explicó qué significa este concepto. Éste último fin de semana se ha abordado el tema en el V Congreso Internacional de Medicina Ambiental. Creo que es necesario aunar todas las prácticas medicinales que funcionen y ofrezcan evidencia científica e introducirlas en el sistema sanitario español. Durante estos días de Congreso organizado por las fundaciones Alborada y Vivo Sano he tenido la oportunidad de escuchar y entrevistar a José Francisco Tinao, médico de la Clínica de Medicina Integrativa, un profesional que comenzó su carrera practicando una medicina «convencional» y que ha ido abriendo su mente a otras maneras eficaces y evidentes de practicar su bello oficio.
Él comenta lo difícil que es salirse del «establishment» sanitario. La Medicina Ambiental y la Medicina Integrativa ofrecen un nuevo campo de información para el éxito en el tratamiento de un gran número de patologías pero cuesta cambiar. El Congreso iba de nuevas patologías relacionadas con la contaminación ambiental (fatiga crónica, fibromialgia, Sensibilidad Química Múltiple o electrohipersensibilidad y tantas otras) y sus tratamientos. Son conocidas como emergentes, multisistémicas o ambientales y sus víctimas mejoran enormemente cuando se elimina la toxicidad en la mayor medida posible y cuando se ayuda al organismo con nutrientes.
-¿Cuales serían las terapias, groso modo, de la medicina «convencional» que funcionan según los parámetros de la Medicina Integrativa?
La Medicina Integrativa procede de la medicina científico occidental, de la medicina de la evidencia. No descarta a priori ninguna medida terapéutica, sino que valora individualmente qué utilizar en cada momento y de acuerdo a las creencias y decisiones del paciente. En cuadros agudos aplica terapias idénticas en su gran mayoría a las de la medicina ortodoxa occidental. Son situaciones graves, puntuales, que necesitan decisiones inmediatas: por ejemplo una crisis asmática o un infarto de miocardio en curso. Lo que hará distinto es el planteamiento preventivo y terapéutico posterior, especialmente en cuadros crónicos. La Medicina Integrativa es una respuesta ante las enfermedades crónicas. La valoración del paciente es global e individual. Cierto que en estos momentos construye un marco de aplicaciones terapéuticas que serán cada vez mayores según se realicen estudios. Desde ese punto de vista es apasionante y también en la notable respuesta que a veces nos deja sorprendidos a los que la practicamos.
-¿Cuales serían las terapias de las medicinas llamadas alternativas, complementarias, biológicas, etc, que se contemplarían en Medicina Integrativa porque son eficaces y tienen una base científica?
El concepto “complementario/alternativo” es una voz que busca denostar o descalificar. No seré yo el primero que diga que medicina sólo hay una: la buena, la que cura, la que palia, la que restaura la salud. Como es lógico son la terapia nutricional, el ejercicio físico o las terapias ortomoleculares las que más publicaciones han avalado sus resultados. También la fitoterapia. En un segundo escalón –y me refiero a estudios epidemiológicos- están la homeopatía o las terapias mente-cuerpo. El campo de las terapias bioenergéticas es apasionante pero todavía enigmático. Hay que revalorar epidemiologicamente el denominado “efecto placebo” y darle una interpretación diferente. Y es un campo que necesita trabajo y estudios. Siempre señalo que la ciencia no acepta creencias, pero tampoco debe tener prejuicios.
-¿Por qué según su opinión o experiencia no se desarrolla la Medicina Integrativa en el sistema sanitario para que pueda llegar a todo el mundo?
En España es desconocida. Donde está más desarrollada es en los Estados Unidos donde el Consorcio de Facultades de Medicina (47) todas de enorme prestigio -Arizona, Yale, Clínica Mayo…- están desarrollando programas de formación a profesionales. En Europa la Sociedad Europea de Medicina Integrativa es reciente y fue creada el pasado diciembre en Berlín, en el seno del IV Congreso Europeo de Medicina Integrativa. Es lógico por lo tanto la situación actual. Habrá que dedicar esfuerzos a darla a conocer, apoyar estudios y reuniones. Comenzará a implantarse en sistema privado inicialmente y habrá alguna expresión en el sistema nacional público mucho más tarde. Pero incorporar unidades de medicinas complementarias aunque es loable, no es crear medicina integrativa. Esto ya fracasó en la década de los años noventa en EE.UU., porque duplica el gasto y muchas veces las conexiones entre práctica alopática y complementarias no siempre son entendidas, ni por unos ni por otros.
-¿Qué se puede hacer para que el sistema sanitario camine hacia esta medicina?
Desde luego hacer las cosas bien. Los que deseamos verla crecer debemos ser cautos y exquisitamente exigentes con nosotros mismos. Somos heterodoxos y la desventaja de serlo es que si no somos brillantes no avanzará y permanecerá en lo marginal. Conocer el escenario global supone hacer las cosas adecuadas cuando toquen. La alianza con los pacientes y la sociedad es una prioridad. Esta medicina surge en gran parte por la presión del público y de los afectados. El enfoque médico cambiará en consonancia con las necesidades de los pacientes, con sus conocimientos y aportaciones. Se necesita un cambio cultural global.
Los médicos están deseando contribuir a mejorar la calidad de vida de sus pacientes. Ellos son el segundo eslabón de esa cadena, principalmente los médicos generales, los de familia, incluso los internistas cuando la descubran se darán cuenta de sus nuevas posibilidades. Un tercer eslabón es el grupo profesional; esta medicina cambia el rol de la relación médico-paciente; hay que trabajar en equipo y con otros profesionales de la salud: enfermería -importantísimo porque en cierto modo ellas han llegado antes que la medicina a esa visión global-, fisioterapeutas, nutricionistas, psicólogos clínicos… el paciente va a ser tratado por un equipo.
Los que se dedican a la divulgación científica y a la información en salud tienen una responsabilidad en ofrecer datos concretos, contrastados y realistas. Ellos suelen llegar a un gran público. Y estudiar, investigar y publicar. Desde la Fundación Vivo Sano tenemos una aspiración a esto último porque es la única manera de demostrar, lo demás es literatura, no ciencia.
Muy interesante todo lo que cuentas.
María del Mar Alcalá pide bibliografia científica. Me gusta.
1.- Se están ya publicando numerosos textos sobre aspectos generales y específicos de la Medicina Integrativa. Casi todos en inglés. Si entra en Amazón y pone la voz integrative medicine le van a salir numerosos libros.
2.-La base de datos Medline contiene numerosas publicaciones desde la medicina de la evidencia sobre aspectos puntuales. Son estudios de investigación. Entiendo que sabe de qué bases de datos hablo.
3.- Incorpore información de las sociedades científicas internacionales y visite espacios web de las universidades americanas integradas en el consorcio de facultades de medicina con programas medicina integrativa. Siento que en español sea poco… es nuestro trabajo.
Si por alguna razón está realmente interesada señálemelo y podemos hablar más detenidamente.
Un abrazo.
Me gustaría poder disponer de bibliografía científica sobre estas terapias que ustedes comentan. Me resulta difícil encontrar ensayos clínicos (sí, esos estudios aleatorizados, con ciego, donde se comparan dos intervenciones médicas o una con un placebo, entre otras muchas posibilidades).
No soy una experta en la búsqueda bibliográfica, pero puede que si hay tanto «olvido» o «silencio» por parte de la administración frente a estas terapias puede que se deba a que no hay mucho demostrado. No podemos pedir al sistema que financie un fármaco/terapia sin una base que explique el por qué de que funcione o, al menos, una serie de estudios que demuestren su superioridad o no inferioridad respecto a las terapias que ya se vienen utilizando para la misma indicación.
Gracias.
Hace 25 años que trabajo aplicando frecuencias de luz codificada por color,y puedo decir que se obtienen muy buenos resultados,ya que el la luz codificada permite,devolver a las celulas codigos que han perdido,recordandoles sus funciones,aumentando la cantidad y calidad de la energia,asimismo ayuda mental y emocionalmente equilibrando y aportando luz nueva a la persona,ayudandole en todo el proceso de recuperar la salud.
Soy enfermera y seria fantastico,aplicar colores,en vez de pastillas,en la sanidad publica.En algunos paises de centro y sudamerica,se está aplicando sintergetica en algunos hospitales publicos,el dia que eso pase,esta sociedad estara de enhorabuena.
SALUD
Para Alex, la palabra encabezamiento se escribe con «b» larga.
Pienso que la medicina integrativa, es la misma medicina holística, en donde se puede mirar al paciente en su integridad.
Que de espías hay por estos lares….Yo soy un espía buenooooo, pro salud.
Pues si señor Jara tal como usted y Silvano dicen el paciente que mas bien es impaciente deberia concienciarse y hacer algo por su salud, por esto creo que la labor principal de la clase medica deberia ser la de educadores-informadores, se deberia informar bien a la sociead de cuales son las causas de la enfermedad y cual la forma de curarse, pues esto de curarse se puede hacer de forma natural y sencilla y no son precisos ni titulos, ni tantos años en estos infiernos que llamais universidad, solo es preciso sentido comun. Sepan que de esto, sentido comun, un simple gorrion tiene mas que la mayoria de humanos, nunca he visto al pasear por el campo una clinica de gorriones.
¡Hola, Miguel! Observando el panorama sanitario desde mi atalaya de profesional al margen del Sistema, comprendo la necesidad de que las «nuevas» (aunque sean mucho más antiguas) formas de hacer «Medicina» se acoplen al cientifismo imperante de cara a ser aceptadas por el propio Sistema.
Se les puede identificar con diferentes calificativos (Integrativa puede ser uno de los últimos), pero no creo que este nuevo intento produzca el anhelado cambio… ¿Por qué lo digo así de categórico? Pues porque veo un mismo modelo filosófico bajo esta «nueva» forma de hacer Medicina:
* persona con un padecimiento consulta con profesional,
* profesional diagnostica y trata la dolencia,
* la persona únicamente se dedica a tomarse lo que el profesional le ha recomendado para «curarse».
Mientras no lleguemos a constatar claramente que las personas tenemos nuestra propia energía sanadora pero que, a base de tóxicos, tensiones mantenidas, decisiones inadecuadas a la hora de vivir, hábitos insalubres…, nos la vamos cargando literalmente, el actual modelo imperante produce y seguirá produciendo la gran cantidad de procesos crónicos que tenemos en la actualidad, la verdadera pandemia del siglo XXI.
En mi práctica diaria, a mí (y a las personas que acuden) no nos hace falta que la Ciencia haya legitimado, tras una comprobación a doble ciego y la verificación del estudio «por pares» que se trata de algo «efectivo». Cuando en las Artes Sanatorias se prescinde de la relación directa entre el sanador y la persona que consulta, se desmonta toda una estructura sanadora apoyada desde la confianza en alcanzar un punto de sanación.
Y llegado a este punto, a la mayor parte de profesionales les entra el «yuyu» de lo desconocido, de lo que no pueden controlar… Al mostrar, por ejemplo, el término «creencia», a la Ciencia le sale un gran sarpullido por todo su cuerpo doctrinal, cuando a través de la propia Física podemos saber que el hecho objetivo depende de la subjetividad del observador. ¿Por qué evitar esa realidad en el Arte de Sanar? (y, siguiendo tirando del hilo, ¿a quién perjudica o beneficia esta manera de hacer, a la hora de establecer las reglas de lo válido y de lo rechazable?).
No digo que no se intente acercar estas formas de actuar al sistema médico actual, pero permitidme que lo vea como una ilusión que acarreará un gran gasto de energía y un gran cargamento de frustración…
Por mi parte, seguiré en mi práctica («marginal») a la vez de no cesar en explicar, a quien quiera oír, sobre cómo «funciona» esto de la Salud y la Enfermedad en el ser humano. Mientras veamos la enfermedad como algo que nos llega de fuera, nos invade y que debemos suprimir, iniciando una lucha contra las incomodidades de los síntomas…, estamos perdidos. Y aquí hablo tanto de la medicina llamada «alopática» como de la llamada «naturista» (¿y también ahora la integrativa?).
Salud para ti y los tuyos.
Silvano, es cierto lo que dices y tu planteamiento. Yo veo más la Medicina Integrativa como algo intermedio o como un paso que dan algunos profesionales de la «convencional» para abrirse a otros modos de curar pero está claro que el paciente no puede seguir siendo eso, paciente, que espera a otro a que haga algo, sino que debe caminar hacia una autogestión de la salud.
Sr Herráez, su cabreo no tiene ningún tipo de sustento pues arremeter contra mi, es fácil. Mire le propongo que me denuncie y lo mismo haré yo si su clinica o lo que sea no cumple los criterios mínimos de calidad, ¡le parece?. Como usted parece muy sano, y yo enferma, pues tengo más experiencia que usted en ver como nos toman el pelo en millones de ocasiones.
Y mire si no arremetiera contra mi, pues genial, pero ha echado por tierra toda su argumentación, pues además de humano, que lo es, es usted un intransigente a los comentarios que no son de su afinidad.
Excelente idea la de diferenciar el tratamiento quirúrgico o médico de las situaciones agudas donde indudablemente con frecuencia salva y mejora vidas, de su uso en situaciones crónicas, donde las enreda, estropea y enferma aun más e incluso mata más de lo que la gente se piensa. Es la cronicidad, real o fabricada, la que hace prosperar a Big Pharma, no las situaciones agudas.
En cuanto a lo que dice Chow habría que añadir que los medicamentos (drogas) usados en ciertas especialides como la psiquiatría, son promocionados off-label para eludir estudios costosos y así adquirir datos, esto incluso en niños y ancianos, que tales estudios incluso cuando se hacen «bien» están trucados o son minúsculos, a muy corto plazo, en entornos sesgados etc y sin embargo sirven para extrapolar conclusiones, que los protocolos de administración de drogas peligrosas o no existen o no se siguen etc. ¿Por qué no se hace un estudio epidemiológico amplio en España desde el Estado de tales medicinas como las estatinas o los antipsicóticos? Tenemos derechos a ellos no? No venga con cuentos Chow
Otro más que se quiere unir al carro de las magufadas… Como dan mucha pasta normal. Si es lo que tiene, vender «medicamentos» a precio de oro sin gasto en ensayos clínicos y demás es un gran negocio. Con eso de que no se consideran medicamentos no están obligados a demostrar nada…
Señor Herraez; atendiendo a su sabia indicación «va siendo hora de que aunemos esfuerzos y además de criticar veamos lo bueno en
el otro no solo lo malo» le comento que su escrito del 1 de julio es buenisimo, y muy acertado. Sepa que el que le escribe tambien acepta ciertos remedios de la medicina alopatica, no todo es malo como usted bien dice.
De paso le dedico una frase espero le guste.
Los medicos están para recetar y cobrar, curarse o no esto va a cuenta del enfermo.
Señor Herraez nadie usa o muy poquisimos el lenguaje de forma correcta, se deberia, pero todos sabemos que no se hace.
Y todos sabemso que medicina y medicamento en lenguaje coloquial son sinonimos, si hubieramos de analizar cada escrito bajo la lupa encontriamos muchas sandeces., incluso los de usted tampoco se salvan.
Concluyendo: Al buen entendedor… con pocas palabras le bastan……..
Paty.
Me parece que insultarnos es denunciable. Claro que denunciar a un nick como que no está contemplado. Eso es lo malo de los blogs. Debería exigirse hablar con nombres y apellidos y así no tendríamos que leer ciertas cosas.
Si relamente es Ud. una enferma le aseguro que sus terapeutas quieren ayudarle a que Ud. se cure. Y le aseguro que sacacuartos hay pocos, la mayoría somos gente de bien que hemos dado nuestras vidas saliendo del sistema y de los 3.000 euros mensuales por unos pacientes que ultimamente exigen demasiado y cuando se cabrean nos llaman sacacuartos.
Ud. es una enferma y se debe tratar, como mejor le venga en gana, o relajarse. Insulte a los que tienen cierta responsabilidad en su enfermedad no a los que intentan ayudarla. Desagradecida.
Un saludo.
Hay que usar correctamente el lenguaje.
Una cosa es «Medicina», que es el «arte de ayudar a los enfermos» y otra cosa es «medicamento». Si decimos medicamento no hay duda de qué hablamos, si decimos medicina, como también tiene acepción de medicamento pues la gente se confunde un poquillo.
Hay cientos de medicinas o «sistemas médicos completos»: Recomiendo ver la peli «Ayurveda«. Luego está el sistema médico chino (mas de 3.000 años de EXPERIENCIA), el Americano, y muchos otros.
Nuestro Sistema Médico Occidental Científico Químico y Físico que no quiere saber nada del Alma, tiene unos 200-300 años nada más, se despreciaron los conocimientos anteriores y se empezó de cero. Ha obtenido unos medicamentos sintomáticos y unas terapias físicas buenísimas para problemas agudos de riesgo de muerte: traumatismos, infecciones no autolimitadas que son las que se dan en inmunodeprimidos (los mas frecuentes en clínica actualmente: todos los ancianos y los medicados con inmunodepresores o las alimentarias), hemorragias, insuficiencias orgánicas agudas, y crisis nerviosas urgentes. No las cura sino que las mantiene en vida. En cuanto a las crónicas tampoco cura ni una. En cuanto al dolor: no lo quita lo tapa y no del todo. En cuanto a la ansiedad: la disfraza. En cuanto a la depresión: la esconde. En cuanto al TDHA no sabemos, lo veremos en 10 años.
Los «tradicionales» no renegamos de la medicina química en los casos necesarios. Los «alopáticos-quimicos» no se por qué critican las otras medicinas sin haberlas estudiado, aunque ahora ya alguno por lo menos las «tolera».
Esta intolerancia sólo vino de un lado en un principio, siendo la razón de tanta crítica biunívoca actual.
Un sinónimo de medicamento es «droga»: por eso lo uso yo en mis comentarios, porque son drogas. Por eso digo que medicarse es drogarse. Es lenguaje. Cada uno lo usa a su conveniencia. No me gusta mentir a la gente.
Pero ya va siendo hora de que aunemos esfuerzos y además de criticar veamos lo bueno en el otro no solo lo malo. Yo siempre he defendido a los médicos convencionales en mis escritos porque yo lo soy también, porque tengo amigos que lo son.
Un saludo.
Para todos los usuarios de este blog os recomiendo la conferencia y los libros del Dr. Karmelo Bizkarra, que aparecen en esta pagina, es muy interesante espero que os sirva de algo.
Salud individual y mejoras sociales derivadas de una alimentación vegetariana, KARMELO BIZKARRA
http://vimeo.com/24123774
Muy interesante. Miguel, ¿podrías pasar los datos de dónde y cómo visitar este doctor? Gracias.
Paqui creo que usted no ha entendido bien.
Se lo repito: medicina es todo aquello que cura, se ésta la que sea, curar significa esto, curar.
Que se está haciendo un mal uso del significado de las palabras, medicina y curar, yo no soy responsable de esto, pero si cogemos un buen diccionario etimológico lo explica muy bien.
Lo que son las «medicinas» que usted comenta y los riesgos que comportan, en este blog ya sabemos todos lo que son, pero yo no me referia a estas trampas que son eso trampas, me refería exactamente a lo que digo y su significado normal y natural.
Creo que mi declaración es tan cientifica sencilla y certera que usted no ha podido llegar a comprenderla.
También debemos empezar a incluir la Medicina Antroposófica, presente en la mayoría de países.
Estos médicos, una vez terminada la carrera, estudian varios años la medicina antroposófica para profundizar en el conocimiento del ser humano
y poder así ayudar a cada perrsona desde su propia individualidad.
En el tema de salud quisiera incluir la geobiología (también se habla de biohabitabilidad).
Se trata de la “salud de la vivienda o la medicina preventiva del hábitat”.
Se puede profundizar en este tema leyendo el libro de Mariano Bueno “Vivir en casa sana”.
Geobiología: un aspecto más a tener en cuenta cuando hablamos de salud en sentido global, holístico o integral.
Aprovechando que se habla mucho sobre FM, SFC, SQM, se crean nuevas clinicas donde sacar el mayor número posible de afectados deseosos de una mejoría. Pero, está demasiado manido el tema alimentación como curación y si hablamos de medicina integrativa habrá que ofrecer algo más que suplementos dietéticos o alimentarios incluso desterrar creencias no cientificas sobre la supresión de ciertos alimentos. Como creer, creo en ello, pero señores integrativos, faltan otras técnicas paliativas al dolor, a la fatiga y a la desintoxicación. ¡¡Que pena de sacadineros¡¡¡ seriedad, no somos mercancia ni queremos que se comercie con nuestra salud.
Paty, desconozco si existe esas técnicas y se aplican en Medicina Integrativa, supongo que sí. Sobre la alimentación, sí, es un tema manido pero que casi nadie cumple, fíjese en los hospitales o en los propios hogares. ¿Qué tipo de alimentación tiene usted? Seguro que ecológica pero todavía es minoritaria, al menos en nuestro país.
En este blog trabajamos según el criterio de que no somos mercancías, si tiene pruebas de que alguien es «sacadineros» preséntenoslas por favor, no haga afirmaciones difamatorias.
Yo sé de una auxiliar de clínica que participa en este blog (aunque por salud cada día menos) que intentó hacer comprender en su trabajo este tema: con la comida se puede ayudar en ocasiones mejor que con un fármaco a un enfermo, incluso que tuvieran en cuenta la presentación de los platos, hasta pretendió que se plantearan a qué horas y de qué manera se daba la medicación ya que la mezcla a veces hace que disminuya un efecto deseado o se estimule uno no deseado. Se encontró con algún médico que la escuchó y lo encontró lógico, pero también se dio con la barrera de las compañeras, hasta a las más “progres” les daba flojera tener que tener en cuenta tanto al paciente. ¡Hay tanto por hacer! ¡Es tan complicado! ¡Cuánto nos puede la pereza! Lo que no quita que haya profesionales que ya se están plantando que su trabajo va más allá del horario.
Alex ¿medicina es todo aquello que cura?
Mejor te hubiera quedado decir:
«Existen muchas medicinas que matan».
Mira Alex mi abuela llegó a los 94 años, sin tomar nunca una medicina o medicamento y ni tan siquiera utilizó nunca una crema, tenía una piel muy lisa, ni una arruga.
Eso sí todos los días se tomaba una infusión de ….. (si indico el nombre de la hierba) allá que sacan una medicina con productos quimicos.
Hoy yo con 61 años y debido a la medicina, lo que hago en este mundo es molestar y perjudicar a mis seres queridos, sí lo que se llama «daños colaterales» [nota del editor: Paqui es una de las mujeres afectadas de por vida por el fármaco Agreal].
Magnifica entrevista Miguel.
La medicina será integrativa en un futuro, pero con el riesgo de que seguramente el sistema quiera absorber de la manera conveniente para él a la medicina actualmente no oficial.
Es responsabildad de los médicos no oficiales que usan medicinas milenarias, naturales y con miles de años de experiencia, velar por estas medicinas. Y formar a los médicos convencionales con los que colaborarían para que no interfieran en desvirtuar la medicina natural convencionalizándola. Así como es responsabildad del sistema formar a los médicos naturistas, cuando no sean licenciados en medicina convencional, en lo necesario para que no interfieran en impedir lo bueno, también, de esta medicina.
En cuanto a lo de la comida de los hospitales te lo juro que ¡no se qué decir!
Saludos y mucha suerte al Dr. Tinao con su proyecto.
Hola Miguel,
Deberías pasarte por la cafetería de los hospitales. Incluso los médicos desayunan un bollo de pan blanco o un donut con café y azúcar blanco. Si ellos son los primeros que no le dan ninguna importancia a la alimentación no esperes que le apliquen esos principios a sus pacientes. Conozco el caso de un oncólogo que se pasa todo el día bebiendo coca-cola Zero (sí, la que tiene aspartamo y que tanto interés tienen en que nos la metamos para el cuerpo).
Además, hay un factor muy importante, que está presente desde el inicio de los tiempos, y es el hecho de que la gente se comporta como un rebaño (en inglés sheeple). Mediante este mecanismo la mayoría hace lo que dice el que tiene el poder, ya sea por miedo o por no tener ganas de pensar. En la época actual el poder lo tienen corporaciones de carácter psicopático cuyo máxima es ver crecer sus ingresos, por lo que estamos completamente vendidos y sin esperanza.
Un saludo.
Señor redactor del blog: El señor Pedro le ha hecho una foto muy exacta del sistema sanitario que usted muy bien ya conoce, dicho sistema esta hecho basicamente para enriquecer a los que ya sabemos y no cambiaran nada.
El mundo está lleno de soñadores.
Como veo que tiene alguna dificultad semantica al intentar expresar su declaracion del encavezamiento de la pagina sobre que es una medicina voy a intentar explicárselo de forma simple y sencilla sin tecnicismos. «Medicina es todo aquello que cura» asi de simple.
El deseo del redactor choca contra un muro llamado sistema sanitario y «los protocolos».
Un sistema que no solo no permite el uso de técnicas y medicinas de probada eficacia en el ámbito privado como la acupuntura, la biorresonancia, la homeopatía y sobre todo la kinesologia (fundamentalmente en cuestiones de incompatibilidad alimentaria y deteccción de problemas internos), sino que tiene por norma impedir que en sus hospitales y tambien en las residencias no hospitalarias, se utilizen por los usuarios las normas de alimentación o de tratamiento que ya venian utilizando antes del ingreso.
De poco sirve que lleves un certificado medico que diga que eres incompatible a la leche de vaca, al trigo (no al gluten, sino al trigo) a la soja, o a algún otro alimento tradicional. Para el sistema (mal llamado público) no existe la certificación salvo que venga de algún galeno tradicional, aunque podrian comprobarlo mediante otros procedimientos (mucho mas caros, claro).
Si el paciente viene siendo tratado mediante acupuntura y eso le permite una relajación muscular durante un cierto tiempo, pues se le mete en el cuerpo el antidepresivo de turno, y se acabo.
Y cualquier tratamiento homeopático que viniese utilizando, queda prohibido por «el protocolo».
El sistema sanitario español solo es de pago obligatorio, pero de uso restringido a lo que digan los protocolos.
Utiliza siempre la norma básica del Despotismo «TODO POR EL PUEBLO, PERO SIN EL PUEBLO». Y con un añadido trágico, la inmensa mayoría de sus profesionales no lee NADA, que no venga de las fuentes de la FARMAFIA.
Pedro, en buena medida es cierto lo que dice. Nunca entenderé cómo puede ser que en los hospitales no se de a los enfermos alimentación ecológica y sigan haciéndoles comer alimentos convencionales, cargados de tóxicos, aun estando enfermos. Si la alimentación es nuestra mejor medicina ¿cuando tendremos alimentación ecológica en los centros de salud?
Y sí, hay que luchar porque los protocolos respeten las necesidades del paciente.