Los anticonceptivos más "embarazosos"
Mi compañero en el Bufete, Paco Almodóvar, que está muy al día de estas cosas sucias, a ver, me aporta novedades sobre un tema del que ya publiqué por estas fechas el año pasado en Discovery DSalud. El número de demandas que la farmacéutica Bayer tiene pendientes por sus medicamentos Yaz/Yasmin en los tribunales de Estados Unidos asciende a 12.325, así lo asegura la página 50 del Bayer’s Stockholders’ Newsletter Second Quarter 2012. Los demandantes alegan que estos anticonceptivos, que contienen como principio activo drospirenona (Yaz/Yasmin de Bayer y los genéricos Ocella/Gianvi comercializados en USA por Barr Laboratories), han provocado daños graves en su salud.
Ahora sabemos que el pasado 19 de julio Bayer alcanzó un acuerdo extrajudicial, sin admisión de responsabilidad legal, con 1.877 demandantes en el país norteamericano por un total de 402,6 millones de dólares. Este acuerdo sólo incluye las demandas realizadas por trombosis o embolismo pulmonar, daños que han sido alegados en otras 6.000 demandas.
Paco sigue este caso desde hace tiempo. Podéis leer más artículos relacionados en esta secuencia judicial:
Se trata de estratificar las pacientes según factores de riesgo (edad, tabaquismo, etc), y también de educar mejor a los ciudadanos, todos, hombres y mujeres, en estos temas. Ni las hormonas son nocivas para la salud si se utilizan bien, ni las pastillas anticonceptivas que le dieron a su vecina van a ser las adecuadas para usted. También parece que los efectos no anticonceptivos de las hormonas se han olvidado, cuando son tan beneficiosos como reducción de la pérdida de sangre, del dolor, del síndrome premenstrual, hirsutismo, acné…
Amparo, no le he dado la vuelta a nada, me explico: me parece que es para enjuiciar a Bayer y a quien no ha sabido llegar a juicio incluida la fiscalía que en estos casos tendrían que actuar de oficio, según mi criterio, sin conocimiento en las leyes. A partir y a la par hice mi comentario queriendo dejar claro que no se ha dado una información saludable ni a los médicos, ni a la población sobre los métodos anticonceptivos, ni sobre las relaciones, en esto estamos según mi criterio por descubrir muchas cosas todavía.
Nuestros derechos no son solamente, que lo son, el que los laboratorios no jueguen con nuestra salud, que los médicos no se dejen llevar por determinados incentivos y actúen de forma profesional y responsable, también hay una parte personal de la que nos olvidamos, en otros temas puede ser la responsabilidad en la alimentación, pues en este, es en no quedarnos en “las necesidades primarias” si fuéramos más lejos en nuestra vida, si diéramos un paso más a los especuladores de la salud se les acabaría la posibilidad de estafa.
¿me he explicado ahora?
Como le has dado la vuelta al post Pilar R ¿según tú no son necesarios los anticonceptivos? No te entiendo, no han servido de poco gracias a ellos se ha podido regular el número de hijos que se querían tener, el problema es que metan cualquier sustancia que a ellos les va bien para comerciar y que a nosotras nos dé consecuencias. Tal y como está la economía es necesario el control con un sueldo normal no se puede arriesgar una pareja a que le lleguen hijos, han sido muy útiles. ¿Lo explicas? Igual tenías un día malo y te dejaste alguna palabra, es muy contundente decir que han servido de poco.
Muy interesante el comentario de Pilar Remiro, nos han vendido los anticonceptivos para mantener esquemas en empobrecimiento de las relaciones con el daño de los efectos indeseados, pero no nos han enseñado a conocernos el cuerpo para tener unas relaciones que vayan más lejos de la necesidad de los anticonceptivos, que para eso se venden para ser anticonceptivos, si después la mujer los creyera necesarios o hay un problema con las hormonas tendrían que ser adaptados a las hormonas de la mujer y no a los intereses de los laboratorios. El cuerpo de la mujer es mancillado de todos modos porque como también estamos enseñadas para aguantar, aguantamos hasta que nos trate mal el ginecólogo. La venta de los medicamentos lo que consiguen es anular muchas de nuestras posibilidades y acostumbrarnos a que con una pastilla se arregla todo y lo que acabamos consiguiendo es alterar el cuerpo, juegan con la ventaja del poder que le damos al médico pero tendría que ser delito que un laboratorio juegue a poner en el mercado algo que va a hacer daño y sabiéndolo siga por el ansia de dinero.
Estamos una vez más ante una situación doble y de doble moral, no se informa generalmente de los efectos adversos de los medicamentos, pero si además son exclusivos para la utilización por mujeres menos, alguna ginecóloga llega a informar, pero pocas. Lo que tampoco se hace en general es, apuntar y notificar lo que la paciente manifiesta como efecto negativo en su organismo al tomar un medicamento, le cambian la dosis o el medicamento por otro en muchas ocasiones dependiendo de la dificultad le dejan el mismo añadiendo un medicamento que tape esas molestias.
Los ginecólogos tendrían que ser más conscientes de que después en ese mismo cuerpo puede desarrollarse una criatura a la que como a su madre le pueden salir las consecuencias del medicamento. Falta exigencia profesional y exigencia por parte de quien contrata ya que se está permitiendo “trabajar” a ginecólogos que no se toman en serio la profesión, sí su sueldo.
Todo esto a la vez de que se permita a los laboratorios utilizar sustancias poco sanas en los medicamentos.
Los anticonceptivos han servido pero poco, porque lo que no se ha hecho ni se hace es informar, ni formar, en el año que estamos aún hoy hay muchas personas que desconoce su cuerpo.
Yo llevaba cinco años tomado las Yasmin, y las deje de tomar porque queria quedarme enbarazada, ahora que tengo a mi niña no quiero volver a tomarlas, intuí que no eran muy buenas, aunque de salud me encontraba bien, no tuve ningun problema con ellas, pero es simple logica… hormonas artificiales en mi cuerpo? NO.