Electrosensibles: ¿Locos por la contaminación electromagnética?
Se publicó hace unos días un artículo que ha ido un poco más allá en la negación del fenómeno de la llamada hipersensibilidad a los campos electromagnéticos. Se titula Electrosensibles: un trastorno psicológico que crece en el primer mundo y tacha poco menos que de “locas” a las personas que, en número cada vez mayor, se quejan de los impactos de la contaminación electromagnética en su salud.
Lo primero que me viene a la mente cuando leo cosas así es que menuda crueldad para con personas que no tienen suficiente con los daños que padecen como para que además se les “diagnostique” periodísticamente problemas mentales. Qué falta de empatía con los sufrientes porque en el post no aparece de ninguna manera su opinión, es decir, no se ha consultado a “las locas” que seguramente tengan algo que decir.
Se “juzgan” además sentencias judiciales que dan la razón a las personas “electrosensibles” y se hace todo en nombre de la “evidencia científica”, que faltan pruebas científicas vaya sobre la citada hipersensibilidad.
Por contra me parece sugerente y por cierto, muy bien escrito un post de José A. Martínez en su atrevido blog Ciencia sin miedo titulado Descreídos de la epidemiología.
Trata sobre las controversias científicas, los prejuicios a la hora de encararlas, el sano escepticismo que ha de guiarnos a la hora de afrontar problemas de salud pública que son nuevos y tanbién sobre el falso escepticismo, el fundamentalista. que llega a poner a la ciencia (ahora en minúscula) por encima de la salud de las personas.
Leer este post me ha recordado la existencia del primero porque en buena medida trata el tema de la contaminación electromagnética. José A. escribe que hay dos tipos de incrédulos:
El segundo tipo es el de incrédulos cerriles, en el que ‘todo es basura’. Bueno no todo, los resultados de investigaciones que concuerdan con sus intereses personales sí que valen, pero los que no son consistentes con su visión del mundo son altamente cuestionables. Si creen que la contaminación electromagnética no afecta a la salud, te dirán que ‘todo es basura’, que todas esas investigaciones son cuestionables”.
Este segundo tipo de descreídos -continúa- sucumben al sesgo de confirmación, tan presente cuando hablamos de consistencia cognitiva; creen lo que quieren creer, lo consistente con sus creencias y prejuicios. Es un modo de autodefensa, una forma de minimizar sus costes psicológicos.
Utiliza muy bien los conceptos este autor y utiliza variados ejemplos que suelen serme conocidos (de hecho me cita amablemente en un par de ocasiones):
Estos descreídos son también vulnerables al efecto halo. Si encuentran que los resultados de una investigación que no concuerda con sus intereses son cuestionables, entonces rápidamente extienden ese razonamiento a todas las demás, sin evaluar su valor.
Es decir, “como esta investigación tiene muchas limitaciones”, todas las demás que argumentan implicaciones similares son inválidas. Este es uno de los razonamientos empleados por personas para atacar cualquier tipo de tópico de investigación, como la asociación entre la exposición a pesticidas y los problemas de salud en niños“.
Nos cita también a Dennis Henshaw, de la Universidad de Bristol, que que se atreve a explicar 35 años de relación entre la leucemia infantil y los campos electromagnéticos de baja frecuencia recurriendo a la literatura de varias ramas científicas que él considera que son olvidadas a la hora de reconocer un problema que tendría otra perspectiva si se adoptara una visión multidisciplinar.
En España ser un investigador multidisciplinar y el propio autor del texto lo ha sufrido en sus carnes.
Significativo es el análisis que hace de los resultados del informe Bioinitiative 2012 (con una actualización en 2014), donde se realizó una revisión de los estudios publicados desde 2007 en relación a los efectos biológicos de la exposición a campos electromagnéticos, tanto de baja como de alta frecuencia. Las pruebas estadísticas a favor del efecto dañino de la contaminación electromagnética.
Tenemos cientos de investigaciones que encuentran asociaciones con diversas enfermedades.
Tenemos muchísimos casos de apariciones de cáncer en personas viviendo en las inmediaciones de fuentes emisoras, ya hayan sido identificadas como cluster estadístico o no.
Tenemos un incremento notable de personas electrosensibles, discapacidad reconocida en algunos países de nuestro entorno.
No existe una prueba definitiva, es cierto, pero los indicios nos llevan a pensar que ‘algo hay’. Esos indicios son, en definitiva, la base de la aplicación del Principio de Precaución, mencionado en el artículo 191 del Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea (UE)”.
Después de analizar los puntos anteriores (es útil que leáis todos) José A. concluye:
considero que tengo indicios suficientes para pensar que la contaminación electromagnética es perjudicial para la salud, por debajo de los niveles que a día de hoy se consideran legales. Tengo indicios, no certezas. Pero esos indicios son suficientes para que yo establezca mi propio juicio al respecto”.
Ese artículo huele a la legua a la secta escéptica esa.
Hola de nuevo: Son Doctores y Terapeutas con diferentes aparatologías los que hacen investigaciones como el Dr. Hílu (de prestigio internacional) los que han relizado pruebas, vea los videos en la pestaña de videos de http://www.acupiramide.com. Si Ud. está interesado o tiene la curiosidad científica abierta, NO científica cerrada (la de las orejeras de siempre) de querer probarlos, abierto estoy a que se hagan cuantas pruebas se crean convenientes hacer, es más, se lo agradecería, porque funcionar, funciona.
¿Ha visto lo referente al trabajo realizado con 1308 pacientes en los Hospitales de Cuba? Ha visto los resultados que nos refiere la Clínica Lizama Flores? Y tantos otros. ¿O crée que hay tantos profesiones a los que se les pueden engañar? Atrévase a probar.
Saludos cordiales
Mario Gil
Cuando hablamos de ciencia a qué nos estamos refiriendo? a la ciencia pagada por las corporaciones de telecomunicaciones o a la investigación rigurosa que se basa en criterios éticos y en investigaciones independientes de cualquier poder. En esta, están trabajando científicos como el Dr. Olle Johansson con un hacer impecable y que se ve amenazado por esos poderes perversos e inhumanos.
Opino que tan solo los psicópatas dejan de tener sentimientos de compasión hacia las personas que sufren, en este caso a los electrosensibles. Este grupo ha sido dañado por una tecnología que no ha tenido en cuenta el principio de cautela, criterio básico a respetar en un mundo donde el desarrollo se midiera por el bienestar de los seres humanos. Pero ante esta agresión, todos estamos en el mismo barco, no pueden construirse búnkeres protectores ; como dice el refrán popular : “arrieros somos y en el camino nos encontraremos”………
Miguel,si quieres desmontarle la teoria psicológica a este tipo de seudo-periodistas dales a leer los trabajos de Dominique Belpomme, un oncólogo francés que lleva muchos años estudiando los efectos de las radiacciones electromagnéticas.
Hace unos pocos meses sacó un estudio muy completo en el que se indica que incluso existen marcadores en sangre como la proteína S100B que demuestran si la persona está afectada por los campos electromagnéticos.
No lo conocía pero parece interesante lo que leo http://www.sensibilidadquimicamultiple.org/2011/09/ehs-y-sqm-resumen-congreso-amica-2011.html No entiendo bien la técnica que usa pero este médico está empeñado en documentar los daños físicos de la contaminación electomagnética.
Os dejo una nota que escribí en mi facebook hace un año…
NOS ESTÁN FRIENDO LOS SESOS…
En el año 1975 el mundo entero se echó las manos a la cabeza al ver cómo en la película ALGUIEN VOLÓ SOBRE EL NIDO DEL CUCO le freían los sesos al joven Jack Nicholson al practicarle una famosa terapia que a partir de 1938 y hasta ese momento hacía furor en los establecimientos psiquiátricos… EL ELECTROSHOCK
Mediante esta técnica se conseguía calmar a los pacientes violentos y su uso era indiscriminado, aunque en principio fue creada para tratar las depresiones graves y los casos de ansiedad severa, al final resulto ser un arma de tortura que se utilizaba a veces sin ton ni son cuando algún paciente “destacaba” de entre los demás y podía poner en peligro la estabilidad de la institución…
Los efectos secundarios eran sobretodo la perdida de memoria reciente (olvidaban por qué le practicaban el electroshock e incluso que se lo habían hecho),nauseas, dolor muscular, desorientación, confusión, perdida de la capacidad intelectual, taquicardia, dolor de cabeza, cambios en la presión arterial…
El electroshock consiste en hacer pasar una corriente eléctrica por el cerebro del paciente(mucha intensidad en poco tiempo), actualmente se sigue practicando aunque en casos muy puntuales, con supervisión de médicos especialistas y bajo anestesia… ¿¿¿SEGURO QUE ES ASÍ…???
A pesar de que toda la población de este planeta está expuesta, existe un colectivo de personas repartidas por todo el mundo que estamos avisando de que nos están FRIENDO LOS SESOS de la misma forma que si nos sometieran a un electroshock aunque con menos intensidad y durante mucho tiempo(exactamente 24 horas al día) pero con los mismos efectos secundarios y algunos más como cáncer, hemorragia cerebral,alteraciones del Sistema Nervioso Central…
Avisamos que si no se toman medidas pronto habrán muchas más personas con ELECTROHIPERSENSIBILIDAD y poco a poco la Sociedad se convertirá en una gran institución donde gracias a los efectos del electroshock encubierto que nos están practicando las personas dejaremos de ser personas con voluntad propia ya que la confusión, el olvido y la pérdida de capacidad intelectual se apoderarán de nosotros y seremos como aquellos enfermos que vagaban por el Psiquiátrico sin fuerzas para rebelarnos y con mucho dolor SI ES QUE VIVIMOS PARA CONTARLO pues la mayoría morirá por las enfermedades que provocan o simplemente porque en un “momento de lucidez” decidirán dejar esta vida…
No soy alarmista, pero los hechos están ahí… Denunciamos el daño que ocasionan las antenas de telefonía, las redes de alta tensión, los wifis… y los gobiernos en vez de escucharnos y retirar aquello que hace daño de las zonas habitadas, lo que hacen es permitir el uso de wifis en los colegios, dejar antenas en núcleos de población, poner wifis en las plazas de la ciudad, permitir que se vendan dispositivos que sólo funcionan con wifi y no se puede bloquear la señal y aparte de muchas otras cosas, para colmo permiten que se estén instalando dispositivos wifi en los hospitales para que los enfermos puedan “disfrutar” de ellos, cuando lo que va a ocurrir es que además de dañar el cerebro de todos los pacientes (de los niños y neonatos ya ni te cuento…), nuestro colectivo deje definitivamente de acudir a un Hospital ya que si no tienen habitaciones y salas para enfermos de SQM, menos tendrán ahora para EHS salvo que nos hagan entradas con apantallamiento antiradiación y lo mismo hasta llegar a la habitación que nos corresponda debidamente protegida contra las ondas… uuff qué difícil lo veo…
Chary Romero
23-03-2015
Es contestación para Chary Romero: Si entras en Faceebook y pones el nombre de Tanya García, podrías preguntarle como está después de haberse recuperado de la electrosensibildad y de los demás males que le aquejaron durante años.
Saludos
Mario Gil
Hola: Por si les puede intersar algo de mis investigaciones. Le dejo este enlace a información e investigación de un caso, creo haber encontrado mediante la analítica celular con microscopio de campo una posible causa de por qué hay personas que padecen de electrosensibilad. Este caso quedó resuelto.
Saludos cordiales
Mario Gil
Enlace
http://acupiramide.es/electrosensibilidad-y-eqm/
Sí, Mario Gil. Gracias a enlaces como el suyo, a técnicas tan racionalmente científicas y comprobables como su “Acupirámide”, no sólo se van a curar todos los afectados, sino que la visión que de ellos se tiene va a cambiar radicalmente.
Dejarán de ser vistos como personas con trastornos psicosomáticos para entrar de cabeza en el de personas con tratornos tratables. Acupiramitratables
En fin, no me voy a reir de otras entradas de su blog con las que se pueden hacer chistes fáciles: “Loq(u)ipuntura” “Me desapareció un bulto” porque a lo mejor parece que me quiero mofar de los enfermos, y no es esa mi intención.
Querido Emilio…si unimos tu apariencia de intelectual al cinismo de tus palabras y a las ganas irrefrenables de crear polémica (todo ello habitual en la mayoría de tus intervenciones en blogs, facebook y demás…), comprenderás que la gente opte ya por no responderte. Ya cansas…
Detrás de tantos nombres/pseudónimos y procedencias como presentas por ahí, mofàndote y atacando a diestro y siniestro a todo aquel que no esté de acuerdo contigo, ya no sabemos quien se esconde detrás en realidad…ni si estás afectado de SSC como dices…
Porque si estuvieras afectado dudo que trataras con tanta frivolidad ciertos temas. (No caben ciertas actitudes cuando se sufre tanto!!)
Búscate otro hobby y no pierdas más tiempo ni energia ni nos los hagas perder a los demás leyendo tus absurdidades. Gracias
PD. Y si no has probado la acupiràmide (probablemente ni seas electrosensible)…lo honesto seria no juzgarla ni desacreditarla.