Las dudas no resueltas de la campaña de vacunación contra la gripe
Llama la atención el despliegue mediático que se hace cada año con la vacunación contra la gripe. Si la llegada del otoño o de la primavera en España la anuncian unos populares grandes almacenes basta poner la tele o consultar un periódico para enterarse de que estamos en plena campaña de inmunización.
Lo que vi en el Telediario de la 1 de Televisión Española el otro día se parecía más a un anuncio que a una información.
La reportera, literalmente dicharachera (ríete de la charlatanería), exponía las bondades de inmunizarse mientras a una anciana le pinchaban su dosis en una sala de un centro de salud (en el Ministerio de Sanidad no se puede grabar pero cuando toca campaña cualquier centro de salud es bueno…).
Incluso pude ver que entrevistaban a una alto cargo del citado Ministerio, tan solícita para esto de la promo y tan esquiva ella cuando las asociaciones de afectados por medicamentos le piden cita.
Por supuesto ni sombra de la más mínima nota crítica.
Llama también la atención tal despliegue anual porque si la vacunación contra la gripe estuviera arraigada en la población no haría falta la citada campaña. Y ese es el problema que han de recordarnos lo que no estamos haciendo.
Algunos titulares recientes:
Sanidade quiere vacunar contra la gripe a más de medio millón de gallegos; La Comunidad [de Madrid] empieza a vacunar frente a la gripe a un millón de madrileños; EN MARCHA LA CAMPAÑA DE VACUNACIÓN 2016-2017: Sanidad recomienda vacunarse de gripe a mayores de 65 años, grupos de riesgo y personal sanitario.
Es cierto que la gripe mata. Lo hace cada año pese a ser una enfermedad benigna (de alta incidencia pero benigna). Los fallecimientos se producen sobre todo en los denominados grupos de riesgo y persona inmunodeprimidas.
El 97% de los pacientes fallecidos presentaba alguna enfermedad crónica subyacente, es decir, no sería la gripe la causa de la muerte.
Se da la circunstancia de que quienes más usan la vacuna de la gripe cada año son las personas mayores. Y por contar algunas cosas que no podemos esperar que cuenten los “telediarios” es precisamente esa población en la que la vacuna presenta una eficacia menor, casi nula.
Hay publicaciones científicas que lo documentan: precisamente en personas de 65 y más años la vacuna es ineficaz.
Además, la efectividad de la vacuna (casos de gripe confirmados por laboratorio, no hospitalizaciones ni mortalidad) fue del 61% en los primeros 100 días tras la vacunación, del 42% entre 100 y 119 días y 0% después. Es una vacuna de baja efectividad. Hay que saber también que pasar la enfermedad te inmuniza contra esos virus que el organismo ha “derrotado”.
También se incluyen en los grupos de riesgo a las embarazadas. La experiencia nos dice que tenemos que ver la composición de la vacuna que nos van a inocular en el caso que decidamos inmunizarnos por esa vía. Lo escribo porque la vacuna más específica que se usó durante la (inexistente) pandemia de gripe A en las embarazadas, Panenza, contenía timerosal (compuesto a base de mercurio) como conservante en la presentación multidosis.
Como indica el médico Juan Gérvas en este post el timerosal se desaconseja en el embarazo. Además, la ficha técnica (la información oficial) de Panenza, expone:
Embarazo y lactancia. Actualmente no hay datos disponibles relativos al uso de Panenza durante el embarazo. Los datos obtenidos en mujeres embarazadas que han sido vacunadas (…) no sugieren malformaciones o toxicidad fetal o neonatal”.
Nada concreto, sólo vagas deducciones. Mirad bien la ficha técnica de la vacuna que vayan a poneros.
Y ¿qué sucede con el personal sanitario? Pues que no se vacuna o no lo suficiente según la autoridad sanitaria. ¿El motivo? Hay varios y los explica muy bien un post titulado Más razones para el no razonable de profesionales y pacientes.
Pese a todo ello, se nos sigue recordando que en 2009 hubo una “pandemia” y es que uno de los virus circundantes este año es el de la gripe A de entonces. Qué suerte porque aquel año no sólo no hubo pandemia sino que la incidencia de la gripe fue mucho menor que otros años. Y se sabía de antemano al comprobar los datos que provenían de la evolución de esta enfermedad en el hemisferio Sur del planeta, donde se da antes.
La A es una gripe leve, de menor mortalidad que la habitual, con menos ingresos en las Unidades de Cuidados Intensivos y menos bajas laborales. Todo ello sin vacunas ni antivirales. Y lo mismo ocurrió el año pasado que también circuló el de la A.
He dejado para el final el asunto de los efectos secundarios de la vacuna de la gripe. No voy a extenderme mucho pues os lo contaba en un post reciente titulado Sobre vacunas a veces confundimos nuestros deseos con la realidad. Y lo explico bastante bien en Confirman que una vacuna de la gripe causa narcolepsia. ¿Sabéis por qué no se produjo esta reacción adversas a la vacuna en Estados Unidos? Porque allí no la autorizaron.
Las reacciones adversas a las vacunas suelen ser leves pero hay casos de muerte o daños graves y si no que se lo pregunten a esta mujer de Costa Rica cuyo caso se publicó hace tres días: se vacunó contra la gripe mientras estaba embarazada y sufrió una de las reacciones adversas más comunes entre las graves, Síndrome de Guillain-Barré.
La gripe no se debe a una infección, es causada por la paulatina acumulación de Sal en los pulmones. Todos sabemos que los mocos son salados, por tanto la gripe es un proceso curativo que sirve para limpiar los pulmones de los muchos gramos de Sal que nos metemos diariamente.
En verano no hay gripes ya que eliminamos sodio por el sudor, la orina y comemos menos sal. La mayoría de las enfermedades respiratorias se curan eliminado el veneno llamado Sal de la dieta http://sensacionex.net/Sal-Veneno.pdf