Bebés y niños acompañados por sus padres en los hospitales
La asociación El parto es nuestro ha emprendido una campaña para conseguir que se respete el derecho al acompañamiento de bebés y niños por sus progenitores en los hospitales.
Esta organización, que ha conseguido el apoyo de otras 65 entidades, considera que en el caso de niños recién nacidos
se violan sistemáticamente las recomendaciones de entidades como UNICEF o la Asociación Española de Pediatría, que reconocen el derecho del bebé a ‘permanecer constantemente con su madre’ y ‘ser amamantado por ella’. Para incentivar esta práctica, conocida como ingreso conjunto, la madre ha de tener acceso al niño las 24 horas del día y se ha de facilitar la permanencia de la madre en el centro hospitalario, ofreciéndole alimentación y un espacio para dormir”.
Sin embargo, la realidad hospitalaria enfrenta a las madres constantemente a situaciones en las que no solo no se facilita su participación en los cuidados de sus hijos, sino que se establece de manera involuntaria una lucha con el personal sanitario, que dificulta la permanencia de la madre junto con el bebé y que complica, además, la propia estancia del menor.
Que los padres tengan garantizadas unas condiciones mínimas de confort e higiene en las hospitalizaciones de sus hijos redunda en el bienestar de todos los implicados.
Numerosos estudios avalan los beneficios del ingreso conjunto o el programa madre participante, que aporta mayores conocimientos de la situación sanitaria de los hijos, así como mejoras en los resultados médicos.
Sin una cama en la que poder descansar junto a su hijo, sin un baño en el que poder asearse dignamente y con la prohibición de ingerir alimentos en las habitaciones en las que los niños están hospitalizados, ¿cómo podemos garantizar que los menores están siempre y correctamente acompañados de sus padres?”, se preguntan desde El parto es nuestro.
Las asociaciones y entidades, que usan en Twitter el hastag #MiMamáCura, exigen a los organismos sanitarios correspondientes que establezcan protocolos de actuación, que además de cumplir con las exigencias sanitarias, también lo hagan con la calidad mínima humanitaria que se espera de nuestro sistema hospitalario.
Demanda:
-Que se garantice el ingreso conjunto en todos los casos en que sea médicamente factible.
-Se priorice la creación de zonas adaptadas para los acompañantes de los menores, dado el importante papel que su presencia cobra en el bienestar de los bebés y niños hospitalizados.
-Se facilite también el ingreso conjunto cuando la persona hospitalizada sea la madre lactante.
Y, en caso de que no sea médicamente posible, se pongan a su disposición medios que faciliten el mantenimiento de la lactancia, como, por ejemplo: Salas adecuadas para el amamantamiento, si el bebé puede acudir al hospital; extractores de leche materna; o espacios para la conservación de la leche materna.
Ningún bebé, ningún niño ingresado debería tener impedimentos para estar cerca de sus padres.
En México, en los Hospitales del IMSS y del ISSSTE, es común tener a las mujeres que parieron en habitaciones compartiendo con enfermas de todo tipo y con un sólo sanitario.
Es aberrante ver como los bebés, recién nacidos, tienen que pasar algunos días al lado de mujeres que padecen todo tipo de enfermedades, graves y quizá contagiosas,
En México, estar en un hospital, para una madre y su bebé es estresante, además del trato despótico de algunos de algunos empleados de las instituciones de salud,
Y mucho más grave son las condiciones de estancia de las madres y sus bebés en hospitales de la Secretaria de Salud,
No hay recursos para el sector salud, a pesar del saqueo que han hecho algunos exgobernadores, hoy acusados de la más escandalosa corrupción.
Las infecciones hospitalarias son un peligro para los recién nacidos, pero seguimos con la estupida e innecesaria costubmbre de tener la zona de maternidad enclavada en hospitales.