El Tribunal Supremo revisará los derechos fundamentales de las afectadas por el fármaco Agreal
El Tribunal Supremo (TS) tendrá que pronunciarse sobre un recurso para la protección de los derechos fundamentales de las mujeres afectadas por el fármaco Agreal, litigio que gestiona nuestro >. Será una buena oportunidad para defender los derechos de las personas dañadas por medicamentos y productos sanitarios.
En 2018 iniciamos un proceso de protección de derechos fundamentales contra la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (Aemps) en nombre de asociación Agreal Luchadoras. Nos basamos en los siguientes motivos:
-Las víctimas del medicamento continúan desprotegidas porque estas mujeres no tienen reconocido el origen de sus problemas psiquátricos y neurológicos por consumo desmesurado de un fármaco neuroléptico, Agreal, que estaba indicado para personas con esquizofrenia pero que se ofreció a las mujeres con sofocos de la menopausia, sanas y por más de tres meses.
-El laboratorio fabricante del tratamiento médico, Sanofi, ha engañado a los jueces y a los médicos.
Gracias a la investigación que ha desarrollado durante tantos años la asociación de Agreal Luchadoras (el medicamento se retiró del mercado en 2005), junto con dos profesores de la Universidad de Alcalá de Henares y el , la Agencia Europea del Medicamento nos entregó información de los ensayos clínicos que a su vez Sanofi Francia envió en 2006 a dicho organismo regulador.
Estos documentos confidenciales son clave para conocer este caso.
-El llamado dossier Agreal (documentos de los ensayos clínicos) revela que el laboratorio farmacéutico no hizo ensayos clínicos a más de tres meses para comprobar bien la seguridad de su tratamiento a largo plazo. Los estudios postautorización del fármaco están mal diseñados y tampoco son de larga duración.
En palabras del abogado que lleva el caso, Francisco Almodóvar:
Sabían que hacer pruebas clínicas del medicamento en mujeres que lo tomasen durante más de tres meses les ocasionaría problemas de seguridad. Muchas de nuestras clientas lo consumieron durante años. El propio dossier de Sanofi dice que no es seguro consumir este fármaco por más de tres meses. Lo sabían y callaron durante muchos años”.
-La Agencia Española de Medicamentos además ha jugado junto con Sanofi beneficiando al laboratorio y dejando indefensas a sus víctimas. Por ejemplo, día de hoy, no quiere actualizar con la evidencia científica una nota informativa suya de febrero de 2007 que exoneraba a Agreal injustamente y contra toda evidencia científica como muy poco después demostraría la Agencia Europea de Medicamentos.
Dicha nota informativa fue creada por la Agencia y estuvo firmada por la directora de entonces, Cristina Avendaño, resultando ser falsa (la actual directora, Chus Lamas, conoce el asunto y tampoco rectifica). Lo demostramos. Esa información oficial, dado que la publica la Agencia de Medicamentos y cuyos errores no quiere enmendar, está siendo utilizada por Sanofi en todos sus juicios y en prensa para argumentar que su fármaco era seguro porque lo dicen las sociedades médicas y la propia Aemps.
Esto también demostramos que es falso y es un gran entramado para negar la verdad. Las afectadas por el Agreal sufrieron un complot de la Aemps, Sanofi y determinados médicos que se prestaron a dicho juego.
Ahora el Tribunal Supremo tendrá que pronunciarse sobre el caso Agreal desde el punto de vista de los derechos fundamentales. Va a ser una importante decisión para la defensa de los derechos de las personas dañadas por fármacos y productos sanitarios y en concreto sufridoras de los engaños de Sanofi y la Aemps.