Un problema de salud pública: La censura del vídeo de Laporte y el cierre de cuentas críticas
Las empresas tecnológicas, gigantes de la comunicación y las redes sociales están aumentando la censura de informaciones y opiniones que cuestionan el discurso oficial sanitario. Incluso cuando la crítica la hacen profesionales acreditados, en sedes oficiales y con documentación de esas mismas fuentes o de fabricantes de medicamentos. El Caso Laporte revela una nueva oledada de censura.
Una conocida red social censura un post mío porque:
No permitimos la publicación de información falsa que pueda provocar daños físicos».
Claro, la publicación en cuestión es una en la que resumo el vídeo de la intervención de un profesor e investigador de la talla de Joan Ramon Laporte en el Congreso de los Diputados.
Basándose en datos oficiales y en concreto en el último informe de farmacovigilancia de la Agencia y en los ensayos clínicos de los fabricantes de las vacunas Covid analiza los aspectos críticos de estas vacunaciones.
El post se titula Vacunas Covid: 375 muertes en España. La única lotería en la que nadie quiere «el gordo».
Esa red social decide que la información de Laporte es falsa y que como yo la reproduzco es falsa y nos censuran. Pero daros cuenta que las fuentes originales son oficiales.
Así que, de manera paradójica están diciendo que las agencias de medicamentos y las farmacéuticas emiten información falsa.
Bueno, eso es cierto pero no es lo que pretendían (pobres responsables de las agencias y farmas, con lo que se esfuerzan en no ocultarnos nada y contarnos siempre la verdad…), claro.
Lo que molesta es que un experto independiente y crítico, de prestigio mundial, ¡EN SEDE PARLAMENTARIA! cuestione la versión oficial de parte de lo que está ocurriendo durante la crisis sanitaria.
Bien pongamos por caso que esas agencias y productores nos cuentan toda la verdad ¿no podemos analizar con rigor sus propios datos y contarlo? ¿Para qué es esa Comisión de investigación entonces? Y ¿dónde quedan los derechos constitucionales como el derecho a la información de la ciudadanía y el de libertad de expresión?
¿Dónde queda la democracia?
Lo de la censura que están haciendo de manera sistemática y a diario las redes sociales y grandes operadores de comunicaciones es inadmisible. Y va a más.
El vídeo de la intervención de Laporte fue borrado ayer por el mayor sitio web dedicado a compartir vídeos. De manera paradójica parece que se lo borran a «ciudadanos de a pié» que lo difunden porque con el Canal Parlamento del Congreso de los Diputados no se han atrevido (sólo faltaría):
[youtube]https://www.youtube.com/watch?v=4I-ZFG76h5Y[/youtube]
El algo que se veía venir pues periodistas influyentes como Beatriz Talegón han sufrido la censura de otra red social centrada en imágenes y vídeos nada más publicar en Diario16 una reseña sobre la citada (y gracias a la censura exitosa) participación de Laporte en esa Comisión.
Y otra red social, esta vez dedicada al ámbito profesional, que últimamente también me censura, ha hecho eso mismo cuando médicos han difundido estos días lo de Laporte.
Al hilo de todo esto, no podía faltar la red social especializada en frases cortas, que cerró hace dos días, sin previo aviso ni explicaciones, la cuenta de Cáncer integral (@cancerintegral) donde se apoya la difusión del Caso Laporte.
El autor usó entonces otra cuenta suya que también fue cerrada (está poniendo su caso en manos de nuestro >).
La irrupción en el mundo on line de las empresas tecnológicas globales y sus redes sociales supuso aire fresco para quienes querían comunicar sin pasar por el filtro de «la oficialidad».
Hoy son todo lo contrario, la policía del pensamiento de los distintos poderes y están socavando la democracia de manera sistemática, cotidiana y global. Lo hacen aliadas con numerosos gobiernos e instituciones públicas interesadas en el control social.
Gracias Miguel… ni siquiera hay nadie detrás, en su momento se programó el algoritmo que censura y chimpum…. al ataque indiscriminado de informaciones que contengan las siguientes palabras encadenadas …. Libertad?
Ya casi no cabe más porquería bajo la alfombra pandémica.
Y no tardará mucho en petar el infierno TANK*.
“Ahora vas y lo tuiteas”, que decía aquel…
si alguna vez tuviste cuenta y no te la han cerrado ya, claro.
¿Saneamos?
No va a ser fácil.
*Infierno TANK, de Terraplanista, Antivacunas, Negacionista y Konspira. El sitio donde el Negocio, sus correas de transmisión y sus vigilantes arrojan en el acto a todos los disconformes con el relato dominante, salvo que presenten un salvoconducto válido, es decir, “pasaporte” o declaración en la que reconozcan su absoluta sumisión al pensamiento único y al consumo masivo y pasivo.