La polémica de la gestación subrogada o vientre de alquiler
La gestación subrogada o vientre de alquiler es una técnica de reproducción asistida en la que una mujer gesta un bebé para otra persona o pareja. Está en el «candelabro» porque la presentadora y bióloga Ana Obregón ha sido madre de una niña así.
En la gestación subrogada la gestante no será la madre del bebé, ya que los padres que contratan el servicio serán quienes lo críen.
A sus 68 años de edad Obregón ha reavivado la polémica sobre la contratación de mujeres para que gesten y den a luz bebés que luego entregan a sus clientes. Según cuentan desde eldiario.es la práctica es ilegal en España y legal en Estados Unidos y otros países y para gente con mucho dinero.
De hecho, en España hay más de 2.500 niños nacidos por gestación subrogada en otros países y luego inscritos en nuestro registro por familias que habían contratado el proceso en el extranjero.
La gestación subrogada es ilegal en España debido a la Ley 14/2006. Además, el Tribunal Supremo falló en 2022 que los contratos de gestación subrogada son nulos de pleno derecho porque vulneran los derechos fundamentales de la mujer gestante y del niño gestado.
Desde el punto de vista ético, algunos argumentan que la gestación subrogada es éticamente problemática porque puede explotar a las mujeres gestantes y convertir a los niños en objetos de compra y venta.
Otros argumentan que la gestación subrogada es éticamente aceptable siempre y cuando se realice de manera voluntaria y se protejan los derechos de todas las partes involucradas.
No hay problemas de salud directamente implicados en la gestación subrogada, ya que se trata de una técnica de reproducción asistida que se realiza en un entorno médico controlado. Es como escribo un asunto, ético y legal.
Sin embargo, en muchos de los trabajos científicos favorables a la legalización de esta gestación se omiten o se minimizan los riesgos para la salud de madres y bebés que conlleva dicha práctica.
Y habrá que ver las consecuencias psicológicas para el bebé cuando sepa cómo ha sido la cosa. E incluso, el impacto emocional que puede suponer «el servicio» para la mujer que ha «prestado» su vientre.
Me sorprende que la mayoría de las opiniones en contra manifiestan un absoluto desconocimiento de esta técnica. No se compra un niño: el embrión es de la pareja de padres, la mujer gestante hace eso- gestarlo. NO es su hijo, pues el óvulo y el espermatozoide procede de la otra pareja.
Por ejemplo, imaginemos que yo, sin problemas reproductivos, tengo una hermana que puede hacer de todo, menos gestar a su hijo (por problemas médicos- hipotiroidismo, incompatibilidad sanguínea, trastorno de coagulación, miomas, tratamiento de cáncer, etc…). ¿No puedo yo ayudarla y gestar a mi sobrino para ella? De hecho, el primer caso de «gestación subrogada» fue una abuela que gestó a su nieto, ya que su hija no podía por motivos médicos. ¿Acaso es esto explotación? ¿Por qué no se permite este tratamiento entre familiares? ¿De modo que «en mi cuerpo decido yo» si quiero abortar, y no puedo decidir yo para ayudar a otra mujer a ser madre?? Por favor, cuánta hipocresía… En la actualidad, hay cientos de parejas infértiles que podían hacer esto, y tienen que recurrir a irse a otros países donde sí se permite, con el gasto tan enorme que supone.
En cuanto al efecto sobre el bebé, compararlo con los bebés que se dan en adopción no tiene lugar. En este caso, los bebés se gestan en un ambiente prenatal de rechazo (no digamos ya si la mujer ha sido objeto de abusos sexuales), cosa, que se intenta mitigar con mucho amor por parte de la familia que los adopta. En un caso de bebé gestado por su tía / abuela / quien sea…. ¿acaso se duda que estará rodeado de un ambiente positivo, aunque la que lo gesta no sea su madre? ¿Y no será un bebé extremadamente deseado, que recibirá todo el amor del mundo?
Espero que haya un debate CIENTÍFICO serio y sosegado, y no un debate político-circense, que es lo que hay ahora.
A menudo sí tiene consecuencias médicas aparte de psicológicas. Es más frecuente la solicitud de cesáreas innecesarias que ponen en riesgo la salud de la madre biológica. La edad de la misma, que suelen ser muy jóvenes con su primer embarazo o por el contrario, con varios, en ambos casos se asumen riesgos. La salud del bebe al que se le priva de lactancia materna y apego natural con la persona que ha mantenido un vínculo en su gestación. Esos sí son consecuencias medicas directas. Sin hablar de si ha habido varios embriones y han muerto un número de ellos implantados o no, y si los óvulos son de la dueña del útero o no. Los traumas del bebé y su desconocimiento por antecedentes genéticos y familiares van a incidir en la salud de más de una persona.