Sanidad ya financia la falsa vacuna contra el colesterol “malo”, Leqvio
Lo anunciábamos hace unos días y ya es realidad. El Ministerio de Sanidad ha comenzado la financiación de Leqvio (inclisiran), el último invento para tratar el colesterol «malo».
NO es una vacuna, aunque es inyectable, pero lo venden como tal porque las vacunas “venden”. Un caso más de ciencia convertida en marketing por la industria de turno.
La prensa está hablando de una “revolucionaria” tecnología porque es una terapia para reducir el llamado colesterol “malo” basada en dos falsas vacunas al año, en realidad dos pinchazos con inyecciones de ARN mensajero.
La población mundial se familiarizó con las vacunas de ARN mensajero, las de Pfizer y Moderna, a raíz de la pandemia de Covid-19. De hecho el último Premio Nobel de Medicina concedido ha sido fue precisamente para los científicos Katalín Karikó y Drew Weissman, por sus investigaciones sobre el ARN mensajero para las citadas vacunas.
La propaganda de estas sigue siendo tremenda, pero recordemos que desde el comienzo de las inoculaciones las instituciones sanitarias, como la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS), advirtieron de daños en el corazón relacionados con estos productos.
Y que, no mucho tiempo después, la misma Agencia reconoció otros daños e incluso muertes. Lo decimos porque será muy revolucionario el invento, pero está señalado por sus posibles efectos secundarios graves en el corazón.
Pues bien, Leqvio, el fármaco que ahora financia Sanidad, lleva la misma tecnología y va a ser la primera vez que se utilicen terapias con ARN en la prevención de las enfermedades coronarias.
Hay que tener en cuenta que este medicamento lleva el triángulo negro que advierte que está sujeto a seguimiento adicional, lo que habla de que su seguridad es desconocida.
Y el prospecto dice sobre esto último: «puede producir efectos adversos, aunque no todas las personas los sufran». Pero, claro, no especifica cuáles… porque se desconocen.
¿Y si el colesterol no es el villano de la película ni el culpable de todos los males? Es lo que explica con claridad el médico Fernando Fabiani en esta intervención en la televisión pública de Andalucia:
¿Y si el colesterol no es el villano de la película ni el culpable de todos los males?@DespiertaCSur de @CSurNoticias pic.twitter.com/aF2L5uUPMW
— Fernando Fabiani ???? (@FernandoFabiani) November 1, 2023
Y es que, como indica el galeno, está demostrado que la pobreza es la principal causa de mortalidad por enfermedades coronarias. Y para eso no hay vacuna ni inyecciones de ARM.
Increible el poder del marketing y un buen plan de comunicación y relaciones publicas para hacer creer a los ciudadanos las bondades de un producto experimental y con muchos conflictos de intereses que se omiten