Cualquier estrategia sirve para vender estatinas como Zocor o Pravachol
Os escribo desde Zafra (Badajoz) donde esta tarde doy una conferencia sobre la vacuna del papiloma (a las 18:30h en el Pabellón Central del Recinto Ferial). Mientras, leo que la American Heart Association (AHA) y el Colegio Americano de Cardiología (ACC) han publicado sus nuevas directrices en la prevención de las enfermedades cardiovasculares. Como dice el médico Juan Gérvas: «Son un ejemplo flagrante de lo mal que está la medicina actual».
Las directrices proponen una gigantesca expansión en el uso de las estatinas en personas sanas; su cumplimiento supondría que más del 44% de los hombres y del 22% de las mujeres sanas entre las edades de 40 y 75 años deberían estar medicándose.
Según los cálculos de John Abramson, profesor en la Escuela de Medicina de Harvard, 13.598.000 de personas sanas en Estados Unidos, para los cuales no se recomendaban estatinas sobre la base de las directrices de 2001, van a caer en categorías en las que están recomendadas.
La AHA está financiada por la industria. Y lo reconoce. Obtuvo 521.000.000 dólares en donaciones de fuentes no- gubernamentales, entre ellas, muchas grandes compañías farmacéuticas fabricantes de estatinas contribuyen con cantidades en el rango de un millón de dólares.
El riesgo de padecer una enfermedad cardiaca está sobrestimado. Siete de los quince autores de estas recomendaciones tienen vínculos con los fabricantes de medicamentos.
La AHA se ha montado un lucrativo chiringuito cuyas campañas de promoción de medicamentos se hacen con «donaciones» de Abbott, Bayer, Boehringer Ingelheim, Bristol -Myers Squibb (BMS ), Eli Lilly, Merck o Pfizer. Escribe Gérvas:
BMS, junto con Merck y Pfizer, son los principales financiadores de la campaña de la AHA Go Red For Women, campaña de concienciación de la enfermedad cardíaca, en cuyo sitio web se dice a los pacientes: Si su médico le ha puesto en tratamiento con estatinas para reducir el colesterol, usted puede estar tranquilo«.
Por supuesto los riesgos de medicamentos como Zocor o Pravachol son minimizados sin pudor. Claro que si en estas condiciones se avisa de que las estatinas «sólo pueden aumentar ligeramente los riesgos de diabetes«…
Leeros el artículo completo y tened cuidado con aceptar medicamentos que además de poco útiles pueden resultar peligrosos.
Ya se han publicado algunos estudios sobre los riesgos de las estatinas en referencia a la diabetes, uno en junio de este año en el que analizaban a 115.709 pacientes. Lo importante es que el paciente conozca dichos riesgos.
A propósito de colesterol, estatinas, efectos adversos (y cambio de paradigma): «Nosotros los médicos con toda nuestra formación, conocimientos y autoridad, a menudo adquirimos un gran ego que nos hace difícil admitir que estamos equivocados. Así que, aquí está. Admito estar equivocado. Como cirujano cardíaco con 25 años de experiencia, con más de 5000 cirugías realizadas a corazón abierto, hoy ha llegado el momento de reparar el daño con hechos médicos y científicos… «. Dr. Dwight Lundel, un ejemplo de honestidad y de que las cosas cambian poco a poco. Artículo en inglés: http://preventdisease.com/news/12/030112_World-Renown-Heart-Surgeon-Speaks-Out-On-What-Really-Causes-Heart-Disease.shtml Traducción: http://periodismoalternativoblog.wordpress.com/2013/12/02/cirujano-reconocido-mundialmente-expone-la-verdadera-causa-de-las-enfermedades-cardiacas/
Otra vez mas de lo mismo. A vender estatinas. Desde que salió al mercado la lovastatina, se ha ido sucediendo un gran número de sustancias casi idénticas en sus moléculas en las que casualmente siempre supera en algo la última que sale frente a las anteriores. El mundo de las estatinas está de moda porque como siempre son sustancias indicadas en supuestas patologías crónicas como la diabetes o la hipertensión en las que el paciente debe medicarse de por vida. Todo un negocio redondo para la industria. Pero una vergüenza para las administraciones que lo permiten y además pagan el gasto. Desde luego es hablar por hablar porque nadie hace nada. Resulta llamativo ver como se mueve este mercado farmacéutico que ya ha iniciado de nuevo miles de acciones especiales para vender más y más. Entre ellas destaca especialmente la multitud de comidas y cenas con médicos para ganar mercado que hacen los visitadores actualmente. Siempre se ha hecho este tipo de eventos pero ahora se ha vuelto a una época parecida a la de los años 90. A comer, a comer y a recetar muchos productos nuevos, que los viejos ya se encargan los visitadores de que queden en el olvido. Ya no interesan. Atrás queda la lovastatina, sinvastatina, atorvastatina etc, etc. Ya no producen comisiones para los visitadores ni cifran tanto dinero para los laboratorios.
Pues eso, con no tomar su «regalito» ya está solucionado el asunto. La clave, como siempre, está en tener acceso a información libre e independiente y no solo aceptar la de los «industriales» y toda su «corte».