Ensayan en España una nueva vacuna del papiloma llamada ProCervix
«Vacuna terapéutica dirigida a eliminar las infecciones genitales causadas por los VPH 16 y 18 y, por lo tanto, prevenir las lesiones precancerosas del cuello uterino». Así es como ha registrado la compañía farmacéutica Genticel un ensayo clínico en la base de datos de la Agencia de Medicamentos. ¿Habrá nueva vacuna del papiloma?
La historia es la siguiente. Existen dos vacunas contra el virus del papiloma humano, Gardasil y Cervarix. Se usan en mujeres (Gardasil también está aprobada para hombres) que NO tienen el virus. Ahora se anuncia una nueva vacuna del papiloma para mujeres que SÍ han contraído el virus (en concreto dos tipos de los más de cien que hay -¡ojo!-).
La vacuna se llama ProCervix y está probándose en varios países de la Unión Europea. En España el ensayo fue registrado el día 8 de enero de este año 2014 y según la base de datos Registro Español de Estudios Clínicos, que ofrece al público la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS), el «reclutamiento» está «en marcha» y esperan conseguir 222 mujeres con las que experimentar en diez hospitales de todo el país.
Genticel lo justifica así:
El virus del papiloma humano genital (VPH) es la enfermedad de transmisión sexual más frecuente. En la mayoría de los casos, el VPH se elimina de manera natural sin causar problemas de salud, pero si la infección persiste, hay un riesgo elevado de desarrollar lesiones del cuello uterino que pueden progresar hacia un cáncer del cuello del útero.
Actualmente no se conoce ningún tratamiento para combatir las infecciones por VPH antes del desarrollo de cambios celulares significativos en el cuello uterino. Por este motivo, se está desarrollando una vacuna terapéutica (ProCervix) dirigida a eliminar las infecciones genitales causadas por VPH 16 y 18 y, por lo tanto, prevenir el desarrollo de lesiones precancerosas del cuello uterino.
Los resultados preliminares han demostrado que ProCervix puede ayudar a combatir la infección y que presenta un perfil de seguridad aceptable. Genticel ha preparado este estudio para obtener más datos de seguridad y eficacia de esta vacuna experimental«.
El único principio activo que ha declarado el laboratorio es imiquimod que ahora se usa como crema para eliminar las verrugas genitales. Estaremos atentos a ver qué nos ofrecen. De momento, sobre este modificador de la respuesta inmunitaria podemos leer:
Prácticamente en todos los enfermos surgen reacciones irritantes y en algunos casos, edema, vesículas, erosiones o úlceras«.
Genticel es una empresa con un solo producto, el que comentamos. Entre sus inversores podemos encontrar Edmond de Rothschild Investment Partners de los Rothschild de toda la vida vaya, una de las familias tradicionalmente más ricas del mundo. También está el fondo de inversión InnoBio, participado por las principales compañías farmacéuticas que operan en Francia (curioso que en él estén GlaxoSmithKline que comercializa la vacuna del papiloma marca Cervarix y Sanofi que lo hace como Gardasil).
No os perdáis este dato, el Estado francés también tiene participaciones por la inversión en esta vacuna (ver apartado The FSI and CDC Entreprises). ¿Condicionará esto a las autoridades sanitarias francesas si tienen que decidir, llegado el caso, sobre la retirada del mercado de este tratamiento?
Buenas tardes
He sido seleccionada para que ensayen conmigo dicha vacuna, estoy bastante indecisa y no sé si saldrá bien. Algún consejo? Muchas gracias
No vayas. Le enseñas el dedo del medio al profesional de turno. Le dices que esto del vudú es una práctica ya en desuso, arcaica y acientífica.
Que se las pongas ellos,»si tan buenas son»…
Los ignorantes voluntarios que desarrollan vacunas comerciales, hasta ahora no conocen ningún tratamiento eficaz (que les de grandes ganancias) y que en su efecto colateral no cure otras enfermedades, por lo cual ensayaran otro veneno que, con la excusa de matar al papiloma dejen a las personas igual o mas farmaco-dependientes.
.
Cada vez más personas conocemos a estos tipos y a otros de su especie, de su clan. Esos que se autodenominan «élites». Sabemos de sus intenciones, de como manejan las masas, de como usan a sus lacayos y a sus serviles perros falderos para controlar «su rebaño». Sabemos como actúan y sabemos lo que pretenden. La clave es: ¿lo permitimos?, ¿aceptamos el juego con «sus reglas», ¿le damos nuestro poder como ganado o actuamos de manera libre y soberana? No son nadie sin nosotros, no tienen más poder que el que parasitan a quienes se lo permiten. Si no sabes de lo que hablo ya va siendo hora de despertar, mais chacun pour soi, que decía Brassens.