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Medicamentos

He leído con gusto el libro Medicamentos. Entre la salud y el mercado, que ha publicado hace poco la editorial Icaria. En primer lugar porque está editado por Nuria Homedes a quien conocí en Caracas hace ya dos años mientras dábamos una conferencia multitudinaria sobre invención de enfermedades por parte de los laboratorios farmacéuticos. Ella es la cabeza visible principal del Boletín Fármacos, que tanto me influyó  la hora de trabajar en mi primer libro Traficantes de salud.

En segundo lugar, porque es un trabajo muy plural; en él encontramos textos de trece personas del ámbito sanitario entre las que podemos leer a Teresa Forcades o al mismo presidente de Farmaindustria, el lobby de los laboratorios en España, entre 2006 y 2008, Antoni Esteve. En medio, un elenco bien escogido de «actores» como Mariano Madurga, de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios o Antonio Ugalde, sociólogo profesor en la Universidad de Texas y coeditor del Boletín Fármacos.

Medicamentos

Hay material muy interesante sobre el papel que juegan las agencias reguladoras de fármacos, con espacio para la crítica sobre sus conflictos de interés con los laboratorios, claro; mucho sobre el desigual acceso a los medicamentos en el mundo, quizá en exceso en un mismo tomo y quizá hecho de menos un análisis de los casos de efectos adversos con resultado de muerte o graves daños a la salud de las personas provocados por los medicamentos, algo que hice yo para la misma editorial con Traficantes de salud, por ejemplo; la «medicalización» de la sociedad, tratado por la monja y doctora en Salud Pública, Forcades; sobre si hoy la industria farmacéutica que se dice a sí misma innovadora es así o no; una defensa de las patentes por parte del representante de la patronal en España; y sobre los efectos de la globalización capitalista en el ámbito de la salud.

Podría destacar muchas conclusiones proque las hay muy variadas en el libro pero quizá por no extenderme demasiado ofrecería algunas reflexiones de Homedes y Ugalde en uno de los capitulos en el que argumentan:

«El objetivo primordial de la industria al generar demanda innecesaria de medicamentos, producir medicamentos imitadores y promocionar medicamentos para enfermedades es conseguir beneficios económicos para los accionistas de las empresas; el problema es que también producen iatrogenia, cuyo coste humano y económico necesita ser cuantificado.

(…) En pocas palabras, es un modelo inaceptable y en nuestra opinión sin viabilidad futura.

(…) Los problemas que enfrenta la industria están muy bien identificados, las estrategias que la industria ha desarrollado también están identificadas y cada día hay más detractores, lo cual no es un buen augurio para la industria. En lo que todavía no hay acuerdo es en las alternativas».

En Medicamentos se presentan también algunas alternativas interesantes y posibles. Libro que les recomiendo y que este mes promocionamos en este blog como habrán visto.

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11 comentarios

  1. ENFERMEDADES DE ORIGEN TOXICO PASADAS COMO PSICOSOMATICAS

    Algo de lo que no se suele hablar mucho es del negocio redondo que representa el llamarle «psicosomático» a síntomas orgánicos que no se quieren identificar como tales. Pongo por ejemplo al síndrome de sensibilidad química múltiple. Con todo desparpajo unos cuantos sectores con gran capacidad de acción y muchos intereses inconfesables cabildean, hasta ahora lamentablemente con éxito, para hacerlo pasar como de origen psicológico. Y así multitud de personas físicamente enfermas (es decir con el cuerpo descabalado por exposiciones tóxicas) se conviertan en usuarios permanentes de medicamentos inútiles para sus dolencias, los psicofármacos, presuntamente destinados a curarlas de lo que están denominando ansiedades psicológicas, hiperventilación, depresiones y toda la pesca. Negocio redondo para unos cuantos.

    Si los diversos sectores sociales, (empezando por la mayoría de los enfermos) fueran mínimamente conscientes de lo que se esconde bajo el tinglado supuestamente psicosomático se revolucionarían. Aunque no hay peligro, el propio centrifugado mental generalizado impide que el público vea lo que no conviene que vea y así cuela la cosa década tras década. Hace un cuarto de siglo estaban de moda las «neurosis», ahora llaman a esos síndromes orgánicos deliberadamente oscurecidos «fobias» y «ataques de pánico». Mañana podrían llamarles masivamente mobbing o acoso en el trabajo. El caso es encontrar términos muletilla que permitan disfrazar cualquier síntoma fisiológico extraño para así no tener que hacer mayores investigaciones que pudieran llamar peligrosamente la atención sobre sustancias ofensivas en el medio ambiente donde se desenvuelve el enfermo. Muy conveniente para los contaminadores.

    Mientras el tinglado médico-industrial descrito se forra de diversas maneras personas con la salud destrozada por trabajos y productos malsanos caen víctimas de abusos que deberían repugnar a las organizaciones protectoras de animales. ¿Hasta cuando? (respuesta: por secula seculorum)

  2. […] Medicamentos Publicado por Miguel Jara el 23 de Abril de 2010 – He leído con gusto el libro Medicamentos. Entre la salud y el mercado, que ha publicado hace poco la editorial Icaria. En primer lugar porque está editado por Nuria Homedes a quien conocí en Caracas hace ya dos años mientras dábamos una conferencia multitudinaria sobre invención de enfermedades por parte de los laboratorios farmacéuticos. Ella es la cabeza visible principal del Boletín Fármacos, que tanto me influyó  la hora de trabajar en mi primer libro Traficantes de salud. […]

  3. Miguel, como considero que la cuestión entre otras cosas es la prevención ¿si a ti te parece correcto? paso a poner esta información aquí (Liga SFC):

    La Red Europea de Asociaciones de SFC (EMEA: European ME Alliance) de la cual la Liga SFC es miembro, pide a todos los ministros de Sanidad de Europa que prohiban la donación de sangre para pacientes con SFC ya que hay una buena posibilidad de que las personas con SFC tengan el retrovirus XMRV y estén contaminando los bancos de sangre. Canadá ya ha prohibido las donaciones de sangre de personas con el SFC:
    las dos cartas dirigidas a: Carta de la EMEA a la Ministra Jimenez y Carta de la EMA a la Consellera Geli.
    Están en ingles.

    El texto en castellano:
    CARTAS DE EUROPA A LA CONSELLERA GELI Y LA MINISTRA JIMENEZ SOBRE EL XMRV EN SFC
    Canadá toma medidas preventivas contra el retrovirus XMRV
    Dos destacadas noticias relacionadas con el Síndrome de Fatiga Crónica nos llegan desde Canadá. La primera de ellas es que el Banco de Sangre Canadiense ha emitido un comunicado en el que dice que aun cuando no se ha establecido una relación concluyente entre el retrovirus XMRV y el Síndrome de Fatiga Crónica o cualquier otra enfermedad, la agencia de forma preventiva, prohíbe la donación de sangre de personas diagnosticadas de SFC. Si uno se pregunta qué consecuencias puede tener dicha prohibición, si los avances en la investigación de este retrovirus, demuestran que el XMRV no produce ninguna enfermedad, se levantaría la restricción y no pasaría nada más. Mientras que si dichas investigaciones arrojan una relación causal entre dicho retrovirus y el SFC, el cáncer de próstata o cualquiera otra enfermedad, Canadá será el primer país del mundo en haber protegido a su población contra el XMRV y salvado a cientos de personas de contraer dicho retrovirus.

    El XMRV es el tercer retrovirus humano identificado. El primero fue el VIH, responsable del SIDA. El segundo el HTLV, es el responsable de provocar
    leucemia y linfomas. En cuanto al XMRV hasta ahora está ligado al cáncer de próstata y al Síndrome de Fatiga Crónica. Parece lógico que se empiecen a tomar medidas para que no siga infectando los Bancos de Sangre, hasta que sepamos más de su etología.

    La segunda noticia que nos ha llegado es que el Gobierno de Ontario y la Asociación Médica de Ontario han reconocido oficialmente el Síndrome de Fatiga Crónica como una enfermedad Neurológica. (OHIP Diagnostic Code 795). El reconocimiento oficial de la enfermedad significa entre otras cosas que nadie podrá volver a decir que la enfermedad no existe y además todos los médicos recibirán formación sobre la enfermedad.

    http://www.mefmaction.net/MECFSFM/MedicalAuthorities/BloodSupply/tabid/1198/Default.aspx

    http://www.mefmaction.net/MECFSFM/MedicalAuthorities/MEOfficialRecognitionON/tabid/214/Defaul t.aspx

  4. ENFERMEDADES DE ORIGEN TOXICO PASADAS COMO PSICOSOMATICAS

    Algo de lo que no se suele hablar mucho es del negocio redondo que representa el llamarle «psicosomático» a síntomas orgánicos que no se quieren identificar como tales. Pongo por ejemplo al síndrome de sensibilidad química múltiple. Con todo desparpajo unos cuantos sectores con gran capacidad de acción y muchos intereses inconfesables cabildean, hasta ahora lamentablemente con éxito, para hacerlo pasar como de origen psicológico. Y así multitud de personas físicamente enfermas (es decir con el cuerpo descabalado por exposiciones tóxicas) se conviertan en usuarios permanentes de medicamentos inútiles para sus dolencias, los psicofármacos, presuntamente destinados a curarlas de lo que están denominando ansiedades psicológicas, hiperventilación, depresiones y toda la pesca. Negocio redondo para unos cuantos.

    Si los diversos sectores sociales, (empezando por la mayoría de los enfermos) fueran mínimamente conscientes de lo que se esconde bajo el tinglado supuestamente psicosomático se revolucionarían. Aunque no hay peligro, el propio centrifugado mental generalizado impide que el público vea lo que no conviene que vea y así cuela la cosa década tras década. Hace un cuarto de siglo estaban de moda las «neurosis», ahora llaman a esos síndromes orgánicos deliberadamente oscurecidos «fobias» y «ataques de pánico». Mañana podrían llamarles masivamente mobbing o acoso en el trabajo. El caso es encontrar términos muletilla que permitan disfrazar cualquier síntoma fisiológico extraño para así no tener que hacer mayores investigaciones que pudieran llamar peligrosamente la atención sobre sustancias ofensivas en el medio ambiente donde se desenvuelve el enfermo. Muy conveniente para los contaminadores.

    Mientras el tinglado médico-industrial descrito se forra de diversas maneras personas con la salud destrozada por trabajos y productos malsanos caen víctimas de abusos que deberían repugnar a las organizaciones protectoras de animales. ¿Hasta cuando? (respuesta: por secula seculorum)

  5. Hace tiempo lei en El Pais, los comentarios de un premio Nobel de Química, que a su vez habia publicado en el New York Times, sobre estas cuestiones. Decía que junto con la industria de la armas y las petroleras, las farmaceuticas estaban controlando el mundo. A través del miedo, miedo a las guerras, miedo a las enfermedades, el consumo excesivo de carburantes. En las farmaceuticas se puede ver esto muy claramente. Todos, absolutamente todos vivimos pendientes de las pastillas, los jarabes, etc. Se inventan síntomas, le ponen un nombre y a continuación la pildorita. Si yo ahora escribo algunos síntomas al azar, habrá muchísimas personas que los reconocen. Así funcionan. Nos dominan, nos controlan a través del miedo, lo triste es que haya médicos que sabiendo eso, lo acepten.

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