¿Pueden el sistema educativo y los deberes ser una fuente de falta de atención e hiperactividad?
El Trastorno de Déficit de Atención con Hiperactividad (TDAH) es un problema social que no para de crecer. Existen factores familiares, ambientales o ecológicos, económicos, que lo potencian pero no se ha planteado si el sistema educativo y el “abuso” de los deberes y tareas pueden influir en esta “epidemia” consentida.
Juan Pundik, es presidente de Filium (Asociación para la prevención del Maltrato al Niño), de la Plataforma Internacional contra la Medicalización de la Infancia y director de la Escuela Española de Psicoterapia y Psicoanálisis. En esta entrevista que le hizo El País Semanal lo primero que responde es sobre que el Trastorno de Déficit de Atención con Hiperactividad (TDAH) no es una patología.
Y pone en cuestión el actual sistema educativo:
No atender en clase no es una enfermedad. Los que derivan a los chicos a un especialista son, normalmente, los profesores que tienen que manejar a 35 alumnos, lo que, naturalmente, no es fácil. Tenerlos quietos y callados puede hasta cuestionarse que sea sano, pero las características de la escolaridad así lo requieren y, en consecuencia, lo mejor es tenerlos drogados. Es lo que se hace con los ancianos en algunos geriátricos”.
En la revista le preguntan:
XL: Pero el niño que no consigue un rendimiento escolar adecuado porque es disperso o hiperactivo tiene más posibilidades de enfrentarse a un fracaso no ya escolar, sino social, con lo que eso supone de traumático…”.
Y responde:
Querrá decir que no consigue el rendimiento escolar que se le quiere imponer. Yo tengo un largo historial de gente que fue diagnosticada y hasta medicada como hiperactiva simplemente porque esa escolaridad que querían imponerle no le servía, porque quería ser bailarina o jugador de fútbol. El problema es porqué les imponemos a todos los niños un menú fijo, cuando cada uno tiene habilidades diferentes. No todos valemos para lo mismo”.
Y en parte ese rendimiento escolar puede estar condicionado por las propias tareas, los deberes que hacen los niños y que si no los terminan en la escuela han de hacerlo en sus casa por la tarde.
Una exhaustiva revisión del máximo especialista en tareas, Harris Cooper, profesor de la Universidad de Duke, concluyó que las tareas no mejoran significativamente el desempeño académico de los niños en la escuela primaria. Es más, demasiadas tareas resultan contraproducentes y los críos que hacen menos tareas van mejor en la escuela. Quizá resulte provocador pero no lo es: ¿Puede ser la escuela una fuente de falta de atención e hiperactividad?
La Organización Mundial de la Salud (OMS) alertó el pasado mes de abril de que los deberes perjudican la salud. El estrés de las tareas escolares desemboca en dolores de cabeza, abdominales y de espalda y causa nervios, tensión y tristeza. Un 70% de las chicas españolas de 15 años aseguran sentirse presionadas por el trabajo que los profesores mandan hacer en casa.
Vivimos en una sociedad compleja en la que cuando hay un problema de salud multitud de causas pueden estar detrás.
Esas causas pueden ser familiares, ambientales (los productos tóxicos pueden causar hiperactividad), comerciales (hay toda una industria que intenta sobrediagnosticar y sobremedicar con fines económicos) y ahora, uno de los espacios donde comienza la sobremedicación, la escuela, puede estar también en el epicentro del problema.
Y este asunto no para de crecer, de aumentar de tamaño según pasa por diferente estamentos o ámbitos como una bola de nieve. Las autoridades sanitarias de Estados Unidos han alertado esta semana de que el exceso de nuevos diagnósticos de TDAH en los menores de cuatro a 17 años ha propiciado que en los últimos 10 años los supuestos casos aumenten un 53% en el país, de acuerdo con el Centro de Prevención y Control de Enfermedades.
Sobre Pundik y conmigo y mi compañero abogado en el podéis ver esta entrevista en la que también tratamos sobre el TDAH:
[youtube]https://www.youtube.com/watch?v=ALkxA7FGsQM[/youtube]
No creo que la actividad escolar,ni hacer algo de deberes provoque tdah. Mas bien creo que se trate de un problema social donde a los ninos y jóvenes no se les pide ninguna responsabilidad . Y ademas creo que detrás de este nuevo Diagnostico lo que hay es UNA ENORME INDUSTRIA FARMACOLÓGICA INTERESADA EN MEDICAR A LA POBLACION. DAR A LOS NIÑOS ANFETAMINAS ME PARECE MAS QUE CUESTIONABLE….
Sabes perfectamente que se trata de un diagnóstico dudoso de nuevo cuño que no ha sido precedido por cambio alguno en el comportamiento infantil.
No caigamos en la trampa de darlo por bueno y tratar de explicar una “enfermedad” que no es tal.
Excelente entrevista a un admirable luchador contra el sometimiento de los niños a la patologización y medicalización.