Antibióticos fluoroquinolonas: España mira para otro lado mientras otros países toman medidas por sus graves daños
En diversas ocasiones hemos publicado sobre los daños de los fármacos antibióticos, y en concreto los estragos que están causando un grupo de estos: Las fluoroquinolonas.
Es cierto que Sanidad ha advertido de sus graves daños, pero como hace casi siempre, con tibieza, sin tomarse en serio el asunto. Reconoce que están causando mucho sufrimiento pero no hace casi nada por remediarlo.
Las fluoroquinolonas se asocian a reacciones adversas que, aunque se presentan muy raramente, son graves, incapacitantes, de duración prolongada y potencialmente irreversibles.
Contrasta la actitud de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) con lo que se hace en otros países.
En Estados Unidos, por ejemplo, los afectados por esos medicamentos están solicitando el código ICD-10 (es el acrónimo en inglés de la Clasificación Internacional de Enfermedades) para los efectos adversos por fluoroquinolonas a través de esta Fundación. Además, se han reunido con los Centros de Control de Enfermedades (CDC) y están a expensas de confirmación.
Mientras en España la prensa sigue sin conocer el caso, en USA y en diversos países de Europa sí que se publica sobre ello, tanto en periódicos o como en televisiones. Este es un ejemplo reciente:
Los distintos daños que pueden provocar las quinolonas están apoyados en estudios científicos. Una de las cosas que diferencia a este antibiótico de otros es que tienen el mismo mecanismo de acción que algunos medicamentos quimioterápicos que inhiben la topoisomerasa II, una enzima mitocondrial de enorme importancia para su mantenimiento.
Así, se sabe que inhiben la topoisomerasa II, entre otras muchas cosas, y esto daña las mitocondrias (orgánulos celulares encargados de suministrar la mayor parte de la energía necesaria para la actividad celular) y las células no pudiendo regenerarse adecuadamente.
Pues bien, en Inglaterra han fortalecido todavía más las restricciones de uso debido a los graves efectos de larga duración que producen esos antibióticos. Allí solo deben administrarse cuando ningún otro antibiótico sea apropiado.
Y en nuestro país vecino, Francia, la agencia que controla los medicamentos está colaborando con la Asociación de Dañados por Fluoroquinolonas, tomando más medidas y realizando estudios sobre esa relación de causalidad entre antibióticos las secuelas reportadas.
Los efectos adversos que pueden ser potencialmente irreversibles afectan a distintas áreas como: sistema nervioso central (ansiedad, despersonalización, ideas suicidas, insomnio, problemas de memoria), neuropatía periférica, daño musculoesquelético/colágeno (aneurisma y disección aórtica, dolor o rotura de tendones, dolor en músculos y articulaciones) daño mitocondrial y fatiga intensa.
Sin embargo, la Agencia Europea de Medicamentos (EMA) realizó un estudio después de las restricciones que se impusieron en el año 2018 para intentar evitar las prescripciones fuera de indicación de estos peligrosos medicamentos. En este estudio de seguimiento España mostró las peores cifras con la tasa más alta de prescripción.
Tras este análisis, la EMA publicó un recordatorio para los médicos sobre los graves y potencialmente irreversibles daños por fluoroquinolonas.
Como recuerdan varias personas afectadas en nuestro país:
La Agencia Española dice los médicos son ampliamente conocedores de los graves efectos de estos antibióticos.
Pero los afectados sufrimos la negación constante de sus efectos por parte de la clase médica”.
Afectados por fluoroquinolonas en España.
Un problema existente es que hay muchas personas ni saben que son afectados por fluoroquinolonas porque la mayoría de los daños que generan no son inmediatos tras la toma, y sus efectos pueden retrasarse durante semanas o meses después de que una persona acaba de tomarlo. No es como con otros medicamentos, que sus daños son visibles enseguida.
Por lo que muchos afectados no atan cabos y son diagnosticados de enfermedades de etiopatogenia desconocida como fibromialgia. “El problema es que aquí somos muy pocos conscientes de la causa de esos problemas de salud crónicos y limitantes que nos comenzaron de la nada”, concluyen estas personas dañadas.
Hola, he descubierto tu página y la encuentro muy interesante e informativa.
Una pequeña anotación para mejorar la noticia, y es el gazapo de la palabra, toposoimerasa. La enzima se llama topoisomerasa, que ayuda en la configuración del ADN, de ahí su importancia.
Un saludo y gracias por informar en este país donde los medios de comunicación están censurados.
Muchas gracias, corrijo.
Soy patóloga. Hace un mes y medio. Me mordió mi gato y se infectó. Hablé con unas compañeras con las que tengo muy buen trato. Y me recetaron esto. Reconozco que se me ha olvidado la farmacología. Lo compré pero tengo la buena costumbre de leer los prospectos. Cuando lo leí no daba crédito. Obviamente, decidí no tomarlo. Tuve que investigar pero no me costó mucho y para mi sorpresa lo que está indicado para mordedura de gato es la amoxicilina. Así que tomé este último. No entiendo cómo no está restringido esta basura para situaciones extremas. Estoy segura que se sabe el daño real. Puesto que es difícil que un paciente relaciones un daño con algo que tomo meses o años antes. En fin, la medicina está en demolición.