estosololoarreglamosentretodos.org: ¿Otro capitalismo es posible?
Estos días pueden verse en la televisión, en los periódicos o en las calles anuncios cargados de optimismo impulsados por una plataforma que responde al nombre de estosololoarreglamosentretodos.org ¿El objetivo?: “Recuperar la confianza”, al parecer perdida por las malas noticias que nos rodean y en especial por la gravedad de una crisis que los propios promotores de la página aseguran que es “coyuntural y, a la vez, estructural, inédita y global. Pero ni es la primera, ni será la última”. Esta campaña está utilizando la imagen de personas conocidas o populares como el diseñador Mariscal, el presentador de tv Buenafuente, el ex jugador de baloncesto Romay o Pau Gasol, el cocinero Ferrán Adriá, la periodista Angels Barceló, el músico Melendi o el escritor Juan José Millás, entre otros muchos.
Fotos: Kalvellido
La propia página explica que la idea surgió de un profesional del marketing que preocupado por el desánimo que acompaña a la crisis redactó un plan de marketing. Cuando estuvo listo lo presentó a las Cámaras de Comercio
“y como también estaban pensando lo mismo que pensamos todos, se entusiasmaron con el proyecto y decidieron contárselo a algunas de las empresas más importantes del país para buscar su apoyo. Esas compañías no lo dudaron, y decidieron apoyar la iniciativa de forma anónima y desinteresada. Como resultado de este apoyo, se creó la Fundación Confianza. Gracias a su esfuerzo hoy estamos aquí. Con un objetivo, con un plan y con la financiación necesaria para poder publicitar este lugar e intentar hacer algo”.
“Ahora toca hacer realidad lo que estábamos pensando, toca hacer, dejar de esperar a que los otros nos solucionen los problemas“, es una de las conclusiones de la iniciativa. Bien, por lo que entiendo estamos ante una situación de crisis histórica, muy grave y todos tenemos que tener confianza en salir de ella. Además, van a venir más crisis, ésta no es la última. Y para salir de ello como hay que recuperar la confianza se crea una campaña de marketing viral que pretende poner a todos los ciudadanos posibles a difundir los mensajes de optimismo de esta página web. Varias cosas:
-No me queda nada claro qué ha provocado la crisis pues no se cita, ni quién, si es que hay responsables. Yo creía que esta es una crisis del modelo económico global, el capitalismo, que a la mayoría de las personas no les hace felices además de aumentar de manera constante las desigualdades y destruir la naturaleza consiguiendo entre otros “méritos” impactos en nuestra salud.
-Considero una contradicción proponerse “solucionar” una crisis pero al mismo tiempo advertir que vendrán más. Entonces no se habrá solucionado nada, digo.
-Pero lo más grave no es que esta campaña carezca del más elemental análisis de la realidad actual, que ya es grave porque cómo vamos a solucionar algo si no sabemos o no decimos qué lo ha provocado. Pues no, lo más grave no es esto insisto. La desconfiante gravedad del asunto reside en que, de manera original, eso sí, esta campaña está financiada por buena parte de las mayores empresas del país, algunas de las cuales pertenecen a los sectores que los analistas y la propia opinión pública más discute como los causantes de la crisis actual, una crisis de modelo económico:
Del ámbito de la construcción, Abertis o SEOPAN; bancos como BBVA, Caja Madrid, La Caixa o el Santander; empresas que producen o utilizan energías “sucias” como Cepsa, Endesa, Iberdrola, Repsol, REE o Iberia; compañías militares como Indra, aseguradoras como Mapfre; de la gran distribución de alimentos como Mercadona, o de la contaminación electromagnética y la monopolización de Internet como Telefónica.
La humanidad no enfrenta un mero “reajuste” de la economía. No. Es el propio modelo económico global el que está en crisis. Seguramente habrá quien piense que la crisis es el propio sistema. A decir verdad, la crisis es el estado normal de funcionamiento del modelo. Así ha sido desde el principio. No puede ser de otro modo cuando dicho “proyecto económico”, por llamarlo de algún modo, se cimenta en el crecimiento infinito en un espacio finito como es el planeta Tierra, la casa común que nos acoge. La puesta en práctica, además, de las recientes estrategias de marketing del miedo son testimonio del fracaso del “producto”. Esta es una campaña de marketing de la esperanza, de la confianza o del buenrrollismo. ¿Cuán malo es éste modelo social que no se vende solo, que necesita de la sistemática creación unas veces del pánico y otras de una irreal confianza con el que se atemoriza & anima a la población para seguir contando un día más de supervivencia?
Asistimos al fracaso de un modelo económico, de una civilización, la de la producción y consumo, la de la satisfacción de los mercados y los deseos humanos y no de las necesidades de éstos. La consuvilización, que diría mi amigo periodista Pedro Cáceres. Esta civilización necesita para mantenerse a flote comercializar cosas de manera continua aunque muchas veces no sirvan para nada. Y por eso esto no sólo no lo arreglamos así, consumiendo (como parece que da a entender la campaña) entre todos, sino que lo empeoramos.
Hay que pensar en cómo superar este estadio y evolucionar hacia otra civilización. Una civilización ecológica, en el más amplio sentido del término. Una organización social que cuestione los conceptos de desarrollo y crecimiento económico, que no pueden ser infinitos por lo explicado con anterioridad. El propio sistema económico el que no es capaz de sostenerse a sí mismo. El actual modelo económico capitalista no puede resolver la crisis ecológica, porque hacerlo requiere poner límites a la acumulación, la misma base del capitalismo.
Más info: El libro La salud que viene. Nuevas enfermedades y el marketing del miedo (Península, 2009) aborda estos asuntos en su epílogo La esperanza brota de la crisis.
YO NO HE PROVOCADO LA CRISIS.
Yo soy un currante y no tengo nada que arreglar para salir de la crisis.
Yo no he llevado a la crisis al país.
Yo no tengo por qué pagar más para salir de la crisis.
Yo no estoy dispuesto a solucionar lo de la crisis con mi sacrificio para que luego cuando se solucione los que se forraron y nos metieron en esta situación vuelvan otra vez a amasar más fortuna.
Yo quiero que los políticos corruptos, los especuladores y todos los que se han forrado a cuenta de los trabajadores devuelvan lo que no es suyo y solucionen ellos lo que provocaron con sus actos.
NI YO NI LA GENTE HONRADA Y TRABAJADORA DE ESTE PAIS SOMOS LOS RESPONSABLES DE LA CRISIS Y NO SE NOS PUEDE EXIJIR NI PEDIR QUE LO SOLUCIONEMOS NOSOTROS NI ENTRE TODOS.